La comida ya no se desperdicia

Llevarse a casa la comida que sobró en los restaurantes era algo cada vez más habitual en Vigo, pero ahora los hosteleros deben ofrecer a todos los clientes esta opción, utilizando además envases reutilizables. Se trata de una de las medidas que recoge la nueva ley de residuos de la Xunta que busca reducir el desperdicio de alimentos en la comunidad, y que si bien ya se aplica en numerosos locales, otros todavía se encuentran en proceso de adaptación a la nueva normativa.

"Es una medida que ha pasado algo desapercibida por los cierres y restricciones", asegura César Sánchez Ballesteros, presidente de la Federación Provincial de Hosteleros (Feprohos). Esta legislación fue publicada en el DOG el pasado 25 de febrero, tan solo un día antes de que la hostelería pudiera reabrir sus puertas en Vigo tras el cierre provocado por el aumento de contagios durante la tercera ola del covid. Ballesteros destaca que en ese momento "para los hosteleros ésta era la última de las preocupaciones, la hostelería aún no está adaptada pero ahora poco a poco iremos haciendo acopio de algún sistema", destaca.

El presidente de Feprohos considera que se trata de "una obligatoriedad más, es algo ya se hacía y considero que la buena fe del hostelero debería primar", indica. Sin embargo, señala que ahora los establecimientos van a contar con estos envases y que además estén personalizados en cada uno de los locales.

Nicolás Pío, Restaurante Nikko

"Me parece bien, ya estábamos acostumbrados a trabajar así"

Si bien algunos establecimientos todavía tienen que adaptarse a la nueva legislación de residuos, otros ya ofrecían esta posibilidad a los consumidores adelantándose a la entrada en vigor de la medida. Es el caso del restaurante vigués Nikko especializado en comida japonesa donde "estábamos muy preparados para esto, esta situación no nos cogió a ciegas porque ya estábamos acostumbrados a trabajar así", asegura su dueño, Nicolás Pío, que destaca que comidas como el 'sushi' siempre funcionaron especialmente bien en terrenos como la venta a domicilio. Considera que se trata de una buena medida para evitar que se desperdicie comida aunque apunta que en estos momentos son pocas las personas que piden llevarse las sobras a casa. "Ahora la gente deja menos comida que antes, últimamente se miden mucho, prefieren pedir poco y después repetir si se quedan con hambre, antes si que pedían más cantidad y era ya algo habitual que se la llevaran a casa si no la terminaban".

Eusebio Prado, Cafetería Nuevo Derby

"Cuando la gente se lleva la comida sabemos que les gustó"

En la cafetería Nuevo Derby, situada en la calle Urzáiz, también empezaron a ofrecer esta opción a sus clientes desde hace tiempo, por lo que "esta ley no nos supone ningún cambio, es algo que ya hacíamos por la comodidad de nuestros clientes", asegura su dueño, Eusebio Prado. Destaca que a día de hoy "hay menos reparo y menos prejuicios que antes a la hora de llevarse la comida que sobra para casa", por lo que se está empezando a convertir en una práctica habitual en su cafetería, donde utilizan envases de aluminio, cartón o de plástico siempre que sean reutilizables y sin cobrárselos nunca a los clientes. "A mi me parece fantástico que la gente se lleve la comida que le sobra, así no se desperdicia y además de esta manera sabemos que les gustó", apunta Prado. El hostelero también destaca la importancia de cuidar la forma en la que se empaquetan los productos que los clientes se llevan a sus casas ya que "la presentación y la imagen es tan importante como el sabor".

Juan Blanco, Pizzería Baires

"Ha sido fácil adaptarse, ya teníamos envases para los envíos a domicilio"

En la cafetería y pizzería Baires también ofrecen ya a sus clientes la opción de llevarse a casa la comida que les sobra. Su dueño, Juan Blanco, asegura que "por nuestra parte nos parece genial, es menos basura que tirar, y si los clientes se lo quieren llevar, la comida es suya". En su caso, adaptarse a esta nueva normativa también ha sido sencillo porque "ya teníamos los envases para poder hacer los envíos a domicilio, que han ido a más desde que empezó la pandemia". A pesar de todo, destaca que todavía no es algo muy habitual. "Cuando la gente viene a comer de menú es muy raro que no terminen los platos, pero si que ocurre con más frecuencia con las pizzas, que además son más fáciles de llevar", apunta Blanco.

José González, Café Jardín

"Yo siempre lo voy a preferir a tener que tirar la comida a la basura"

José González, dueño del Café Jardín también ve con muy buenos ojos esta medida ante la gran cantidad de comida que se desperdiciaba en la hostelería cuando sobra. "En este trabajo siempre hay algún derroche y yo siempre intenté tirar la menor cantidad posible de comida y daba la que sobraba a Cáritas", asegura González. Ahora asegura que recibe esta medida "encantado, yo siempre lo voy a preferir a tener que tirarla a la basura". A pesar de todo, destaca que no es muy común que la gente no se termine los platos que ha pedido, "es mucho más habitual que los encarguen para llevar directamente a su casa, especialmente desde que empezó la pandemia, y nosotros lo notamos incluso más con las bebidas como el café".