Castrelos suma piezas sobre la familia Quiñones de León

Valorados en 5.200 euros, son objetos personales, donados por Leanda de Lisle, una sobrina de la viuda del marqués

El retrato de Mona O'Brien, íntima amiga de Maryanne Whyte, de 1900.
El retrato de Mona O'Brien, íntima amiga de Maryanne Whyte, de 1900.

El museo de Castrelos incorporará nuevas piezas relacionadas con sus últimos moradores, el matrimonio formado por Maryanne Whyte y Fernando Quiñones de León y Elduayen, marqués de Mos y de Valladares. De no contar con apenas fondos sobre esta familia, recibirá la que será la tercera donación en los últimos meses. La junta de gobierno aprobará hoy que se acepte esta oferta de manos de la británica, Leanda de Lisle, sobrina segunda de la última residente del pazo.

El álbum con fotografías familiares y con dos postales del pazo, datado entre 1913 y 1915, pasará a formar parte de la colección de Castrelos.
El álbum con fotografías familiares y con dos postales del pazo, datado entre 1913 y 1915, pasará a formar parte de la colección de Castrelos.

El lote consiste en 70 placas estereoscópicas, valoradas en 1.500 euros, sobre vistas de interiores del pazos y de sus jardines y una cigarrera irlandesa, de 2.000 euros, realizada en turba, un material simbólico para los irlandeses. Los técnicos del museo consideran que estos objetos podrían ser de Quiñones de León. La donación se completa con dos fotografías en blanco y negro de familiares de Maryanne Whyte (Mona O' Brien, su amiga íntima, casada con el conde O'Brien, y su hermana Ebba Harline d'Iberville Le Moyne Whyte), junto a dos postales del Pazo de Castrelos y de Milton Abbey, la residencia de su hermana. El álbum tiene un valor estimado en 1.700 euros.

Las placas fotográficas sobre vistas del interior del pazo y del jardín, posiblemente realizadas por el marqués.
Las placas fotográficas sobre vistas del interior del pazo y del jardín, posiblemente realizadas por el marqués.

Al igual que las dos anteriores donaciones, su interés no radica en su cuantía económica, que asciende a 5.200 euros, sino en su importancia para contextualizar la historia del inmueble. “El museo no tiene en la actualidad ningún objeto directamente relacionado con Fernando Quiñones de León, hijo del donante, el marqués del Alcedo, y solo alguna fotografía de la viuda, Maryanne Whyte. La aceptación de esta donación significaría incorporar a la colección municipal piezas de gran valor histórico evidente tanto para el museo como para la historia de la ciudad, aspecto particularmente destacado en el conjunto de placas fotográficas que se donan y que permitirán conocer gráficamente los interiores del pazo y de su jardín en aquel entonces”, defiende el director de Castrelos, José Ballesta, en su informe sobre la propuesta.

Retrato de Ebba Harline d'Iberville, hermana de la marquesa.
Retrato de Ebba Harline d'Iberville, hermana de la marquesa.

La donante, Leanda de Lisle, manifestó su deseo de que en la exposición de los objetos apareciese la inscripción “In memoriam Rupert March Phillips de Lisle, 1988-2023”.

Este lote se suma a los otros dos recibidos también desde Inglaterra el mes pasado. Así, Catharine Dooley, hija de Harry Davies, protegido del marqués consorte, Cecil Allanson, el tercer marido de Whyte, cedió una donación valorada en 800 euros, que incluye la fotografía original de la boda de Whyte y Allanson (150 euros); un retrato original sobre papel de Cecil Allanson (300 euros) y fotografías familiares (dos individuales de Allanson y una con sir Ian Hamilton en Montecarlo, por 250 euros). Posteriormente, se añadió la reproducción moderna, de 1981, del cuadro “Gurkhas en Sari Bair. Gallipoli” (1915), del pintor Terence Cuneo (100 euros). La participación de Allanson en esta batalla fue considerada heroica.

El segundo lote, ofrecido por Peter Davies, es una acuarela, valorada en 300 euros, de autoría desconocida y fechada en 1925, representa una esquina del jardín con el pazo de Castrelos de fondo. Se cree que podría haber sido realizada por una sobrina de Cecil Allanson, el tercer marido de la última marquesa, Maryanne Whyte, cuya su visita está documentada ese año. Estas adquisiciones surgen de los contactos logrados por el museo municipal tras investigación del entorno de la última residente del pazo.

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