"Cada vez se detectan adicciones en edades más tempranas, incluso en niños de 9 y 10 años"

Elvira Rivas y Emilio Díaz, coordinadora y trabajador social de Érguete

Publicado: 22 jun 2022 - 23:18 Actualizado: 23 jun 2022 - 11:27

Elvira Rivas y Emilio Díaz visitaron Atlántico para hablar de su labor.
Elvira Rivas y Emilio Díaz visitaron Atlántico para hablar de su labor.

Elvira Rivas y Emilio Díaz son trabajadores de la Asociación Érguete. Una vida entregada a orientar y acompañar a las personas con problemas de adicciones, en un intento por mejoras sus vidas y reestablecer su manera de vivir, lejos del caos y de las complicaciones. Una labor social que va acompañada de una enorme vocación.

¿Cuál es la historia de Érguete?

Elvira Rivas: Érguete nace en la década de los 80, a raíz de un grupo de padres y madres de personas afectadas deciden salir a la calle para visualizar la problemática de ese momento, con el auge de las adicciones de heroína. Desde nuestra asociación le dimos voz a lo que vivían los jóvenes en aquella época. Para nuestra asociación lo importante fue ser capaz de no tener miedo. El desconocimiento en el tema de las drogas era brutal. Yo empecé en el año 1991 y nos pilló a todos un poco desprevenidos. También vino asociado el tema del VIH, que barrió a muchísima gente.

¿Tiene que ser un trabajo vocacional el que realizáis?

Emilio Díaz: Totalmente. A verdade parte do que nos queiramos como asociación. A carreira nos forma, pero o que nos da a verdadeira esencia é a continuidade. Ter que estar ahí. Non é algo que podes dicir que te lucres con iso, ten que ser vocacional.

¿Un trabajo con personas que, puede ser muy gratificante, o muy frustrante?

ER: Hay una parte que te tiene que gustar: trabajar con personas. Eso tiene una doble vertiente: por un lado es muy gratificante pero luego hay muchos momentos que puede ser frustrante porque estás conociendo las miserias de las personas y la parte más dura de su vida. Eso siempre es duro, tanto para las personas como para nosotros, que tenemos que trabajar. Todas esas emociones, sentimientos...tienes que pelear continuamente y tener recursos para hacer un mejor servicio para estas personas que se lo merecen y tienen ese derecho. Eso es lo frustrante. Intentar todos los días dar voz a esas personas y reclamar un mejor servicio. Hemos conseguido cosas que no teníamos, pero no es suficiente. En drogas es continuamente cambio, y para ello necesitas gente que te apoye.

¿Cómo se tratan esas conductas adictivas desde la Asociación? ED: Dentro da entidade temos varios programas. Depende un pouco cara o campo de intervención o que vai. Temos os problemas dedicados máis o ámbito da prevención, e que se realiza moita de ella no ámbito escolar. Despois temos a intervención dentro da institución penitenciaria, no cal tamén temos unha serie de programas do colectivo en si. E despois tamén temos o apoio as vivendas. A función do traballador social neste ámbito vai un pouco en función da demanda da persoa. Xestionar recursos, ou darlle posibilidades de formación, e ti vas canalizando esa demanda.

Tratando el tema de la drogodependencia, existe quien esté por voluntad propia, y quien aún no sabe que tiene un problema de adicciones.

ER: Exacto. A veces una persona viene teniendo claro que tiene un problema y quiere buscar una solución, o puede desconocer los recursos. Es un viaje que le puede llevar toda la vida con épocas buenas y épocas malas. Nuestra función es estar ahí siempre, darle la posibilidad de que sepa que con nosotros puede contar en cualquier momento. Otra parte puede venir por las familias cuando la persona todavía no tiene conciencia de su realidad, y les orientamos a cómo poder ir trabajando y dar el paso.

Un problema para las familias cuándo no conocen la realidad.

ED: Moitas veces hai que ter un bo andamiaxe para ir recoñecendo o problema, dentro das posibilidades de cada un e o de cada un que queira que sexa intervido. Na nosa entidade levamos os problemas socioeducativos. Cando vemos que realmente temos unha persoa que ten unha conducta adictiva, entonces facemos un proceso de derivación a outros centros. Mantemos sinerxias con outras entidades.

¿También existe las adiciones en niños y adolescentes?

ER: Hay una adición a las tecnologías enorme. Los profesores lo están detectando en las aulas en edades muy tempranas de Primaria. Ahí ya estamos interviniendo. La pandemia disparó el uso virtual para comunicarse, y ahí está el descontrol. Se está comprobando en las aulas actitudes más agresivas y comportamientos que no son acordes a su edad. En temas de pornografía también estamos viendo un acceso de niños que no tienen la capacidad madurativa para ver eso. Le estamos pidiendo a los menores que sean responsables de un móvil cuando ni lo necesitan ni tienen capacidad para ello. Lo ideal sería que, a medida que el menor va creciendo, se le va dando pequeñas píldoras que se sepa que puede asumir. Y con una labor de acompañamiento.

¿Y cuál es la solución?

ED: Son menores e son os nosos fillos. Por tanto a educación corresponde a nos tela. Temos que asumir unha gran parte, non podemos delegar a súa educación. Se está delegando en outros actores, pero nos somos os fundamentais. Temos que traballar moito o tema de normas e límites

Drogas y salud mental. ¿Van Ligadas?

ER: Van de la mano. Hay estudios que indican que el consumo de drogas provocan patologías mentales. Hay que intentar, una vez que se detecta, dotar de recursos. Y no los hay. Son problemas muy complejos; si algún factor te falla, puede venir un brote. Y no tenemos los recursos suficientes.

Contenido patrocinado

stats