La cabina desinfectante más económica se fabrica en Mos

“Fue algo improvisado en un momento en que hubo un bajón del trabajo. Dejamos de visitar clientes a sus domicilios viendo la problemática con los contagios”, recuerda Daniel García, gerente de la empresa.

“Sterilizer Box”, nombre con el que se bautizó al proyecto, es una cabina de desinfección diseñada para la esterilización externa de las personas y su vestimenta. De forma automática, nebuliza una solución desinfectante cuando se accede a su interior. Dispone además de un sensor que detecta la entrada de personas y unos indicadores luminosos para conocer en qué momento se inicia y finaliza el proceso de desinfección. “Estamos dándole vueltas a la posibilidad de instalar un medidor de temperatura para hacer más completa la cabina”, señala Daniel.

Este nuevo proyecto cuenta con la implicación de Daniel –mente detrás de la cabina de desinfección– y tres de sus empleados, disponiendo ya de un prototipo de fácil instalación y adaptable a las necesidades de los clientes. “En un primer momento habíamos pensado en orientarla a empresas, pero estamos encontrándonos múltiples posibilidades para otros sectores y de una forma muy fácil y sobre todo, económica”, asegura el gerente de Automatismos Corten.

“Sterilizer Box” se probó con diferentes soluciones desinfectantes comerciales –algunas con certificados virucidas homologados en la eliminación del coronavirus en las superficies–. La empresa ya trabaja para lograr que su proyecto reciba la certificación oficial como un producto efectivo en la lucha contra el virus.