La Brilat regresa a Vigo tras liderar por primera vez una brigada de la OTAN

El puerto de Vigo ha sido testigo del regreso del material militar empleado por las unidades españolas en la misión de la OTAN en Eslovaquia, tras el exitoso cierre de la operación ‘Strong Lineage 25’. El repliegue marca el fin de una operación que ha situado a España en el foco de la estrategia aliada, liderando por primera vez una brigada multinacional en territorio eslovaco.

En el ejercicio, que comenzó en enero y culminó este 30 de junio, participaron 2.000 militares, de los cuales 1.450 eran españoles, junto a 410 vehículos de combate. El despliegue estuvo liderado por la Brigada Galicia VII (BRILAT), con base en Pontevedra, y supuso un hito logístico y operativo tanto para esta unidad como para el conjunto de las Fuerzas Armadas españolas.

Un despliegue sin precedentes

La operación se desarrolló en el campo de maniobras de Lest, donde la BRILAT asumió el relevo de la República Checa como nación líder de la brigada de la OTAN en Eslovaquia. El 30 de junio se formalizó el traspaso de liderazgo, marcando un antes y un después en la proyección exterior de las Fuerzas Armadas.

Durante estos meses, los efectivos españoles llevaron a cabo maniobras intensivas centradas en la disuasión y defensa colectiva, en coordinación con aliados internacionales. El proceso de RSOM inverso —acrónimo militar que designa el repliegue de personal y medios— ha culminado este domingo con la llegada del equipamiento a Vigo, cerrando con éxito la operación.

Este retorno a casa refuerza la capacidad de España para proyectar y sostener fuerzas a gran distancia, validando su compromiso con los valores compartidos de la comunidad internacional y su papel como actor clave en la estabilidad del flanco este de la OTAN.

Vigo, punto final de una misión estratégica

El material descargado en el puerto de Vigo será trasladado a las respectivas bases, principalmente a la Base General Morillo, sede de la BRILAT en Pontevedra. Este cierre operativo demuestra que la movilidad táctica, la rapidez de despliegue y la cohesión multinacional son elementos clave del nuevo modelo estratégico de defensa europea.

La experiencia adquirida en ‘Strong Lineage 25’ se convierte ahora en un valioso recurso para futuras operaciones conjuntas, consolidando a las Fuerzas Armadas españolas como una referencia en capacidad de respuesta y liderazgo militar en el seno de la OTAN.