El Ateneo abre un debate público sobre el derecho a morir dignamente

El vehículo para hablar de estos temas será el cine, con la proyección de un documental de 45 minutos que recoge escenas de varias películas conocidas que abordan este problema, como “Mar Adentro”, “Truman”, “Amour”, “As invasións bárbaras” o “El paciente inglés”. Le seguirá un coloquio que contará con la participación de representantes de la Asociación Dereito a Morrer Dignamente Galicia, que responderán a cuestiones como la eutanasia, el testamento vital, el suicidio asistido o los cuidados paliativos.

El documental será presentado por el anestesista ya jubilado Miguel Mora, quien señala que es un asunto complejo en el que influyen cuestiones personales, éticas, médicas y legales, y que hay países en los que es legal el suicidio asistido como Suiza o donde se permite la eutanasia como Bélgica, un país al que acuden algunos franceses al final de su vida por este motivo.

En el caso de España explica que está legalizada la limitación del esfuerzo terapéutico en enfermos terminales a partir del momento en que se puede parar el tratamiento. “En la práctica cotidiana de los hospitales hay algo aceptado, legal y comprendido por los pacientes y familiares, que es no prolongar la vida innecesariamente durante dos o tres días cuando se pueden aplicar a lo mejor tratamientos que calman el dolor y que como efecto secundario hace que fallezcan antes, pero no es con ese fin sino con el de evitar el dolor”. En cambio, hay otros casos como el de Ramón Sampedro que estuvo durante años buscando a una persona que le ayudase a morir. “Aquí podría pasar que pacientes con dinero podrían viajar a Suiza para un suicidio asistido y los otros no”. Miguel Mora dice que los médicos fueron formados para lograr que la vida se prolongue al máximo, pero que hay que considerar (y regular legalmente) los deseos de los pacientes terminales, con un horizonte de vida muy corto. n