San Enrique resucitará Vulcano tras el visto bueno del Puerto

El consejo de administración de la Autoridad Portuaria (APV) ha dado visto bueno a Astilleros San Enrique, del grupo Marina Meridional, la única oferta presentada al concurso convocado para adjudicar la antigua factoría Vulcano, lo que permitirá hacer efectiva la concesión por 15 años de las instalaciones una vez se superen trámites administrativos, en dos meses. En concreto, se trata de una superficie propiedad de la APV de 18.000m2 y las instalaciones ubicadas en el mismo, con destino a la construcción y reparación naval. Se da la circunstancia de que esta firma ya había gestionado durante unos meses la antigua compañía Vulcano, aunque sin apenas actividad. Otro tanto a su favor es que el propietario de Marina Meridional, el empresario vigués José Alberto Barreras Barreras, es también el dueño de las parcelas vecinas, otros 30.000 metros, destinadas a prestar servicio al astillero.

A partir de este momento, se iniciará el trámite de la concesión administrativa, que se podría resolvet de forma definitiva en el consejo de abril, lo que permitirá reiniciar el trabajo en la factoría, que así se recupera para el sector naval tras varios años sin actividad. La otra gran empresa, Barreras, está pendiente de su adjudicación, probablemente la próxima semana, en este caso por el juez.

Según informó Vázquez Almuiña, la Comisión Técnica ha analizado la única oferta presentada y elaborado un informe sobre la base de los conceptos de valoración, con excepción del concepto correspondiente al “estudio de viabilidad económico-financiera”, que fue valorado por una empresa independiente. Astilleros San Enrique presenta un proyecto industrial centrado en la construcción, transformación y reparación de buques de esloras de hasta 180 metros, en una proporción del 60% para la construcción y el restante 40% se repartirá entre transformación y reparación. El compromiso inversor es de 1.627.958 euros, destinado a obras en las diversas instalaciones. El proyecto fija la ejecución de estas obras en un plazo máximo de 24 meses. Además, contempla la ejecución de obras adicionales para la instalación de placas fotovoltaicas (125.000€) y dotación de medios de protección contra la contaminación marina (100.000 euros), así como la adecuación de redes de suministros (321.000 euros), grúas y otra maquinaria (31.500 euros). Por ello, la inversión final es bastante superior al mínimo establecido de 1.218.500 euros para alcanzar el plazo concesional de 15 años, superando esta cifra en 225.000 euros.

En lo que respecta al volumen de negocio propuesto, también cumple los requisitos del pliego de bases (10 millones de euros anuales), pues mantiene este importe los primeros dos años, aumentándolo durante los siguientes, para llegar en el 2036 a un volumen de 14,6 millones de euros. Sobre los medios humanos para la explotación y mantenimiento de la actividad e instalaciones, la oferta recoge un compromiso de contratación de forma directa de 28 personas durante el primer año, hasta alcanzar las 79 en un plazo de 15 años, además de los empleos indirectos en las empresas auxiliares.

UGT celebra la recuperación de la actividad naval en la Ría

La primera reacción fue positiva, de UGT Vigo, que destacó la recuperación de la concesión de Vulcano para la reparación y construcción naval. “Ahora le toca a astilleros San Enrique dotar de carga de trabajo las instalaciones de cara a recuperación del empleo y a la actividad industrial”, señaló el sindicato en una nota. UGT espera que esta adjudicación, así como el proceso de venta de Barreras, permitan relanzar el sector naval en la ría de Vigo de la mano de los dos astilleros de más capacidad. “El sector naval de Vigo necesita empezar la construir un nuevo futuro que esté basado en la innovación”, señala.