Tres años de cárcel por dejar incapaz a otro de un puñetazo

Sucesos

El responsable de una agresión en 2016 al cliente de un bar, con antecedentes y que estuvo en busca para eludir el juicio, logró un acuerdo de mínimos. Le pedían 12 años

Publicado: 19 ene 2023 - 00:25 Actualizado: 19 ene 2023 - 11:44

El acusado, ayer, durante la vista por conformidad celebrada en la sección quinta de la Audiencia en Vigo.
El acusado, ayer, durante la vista por conformidad celebrada en la sección quinta de la Audiencia en Vigo.

Aún sin poder reprimir las lágrimas, los familiares del hombre que quedó incapacitado a consecuencia de un brutal puñetazo en la cabeza, acudían ayer a la Audiencia en Vigo, por tercera vez, para sentar en el banquillo al responsable. El autor, natural de Rumanía y con antecedentes penales por hechos similares, estuvo en busca para eludir el juicio por el que se enfrentaba a 12 años de prisión. Tras ser detenido, pudo sentarse ante el tribunal y alcanzar un acuerdo de mínimos que dejó la pena de cárcel finalmente en tres años. Eso sí, tendrá que abonar una responsabilidad civil por los hechos de 120.000 euros.

La indemnización no podrá ser cobrada por la víctima, porque falleció dos años después de este ataque por causas ajenas al mismo y tampoco servirá para redimir el dolor de una familia, que siete años después no ha conseguido pasar página.

La condena se hizo efectiva ayer, según acordó el tribunal durante la vista por conformidad.

El acusado, según el fiscal, se encontraba en julio de 2016 en un bar de Redondela en estado muy alterado y eufórico y comenzó a molestar a los clientes del local. En un momento determinado, cuando se encontraba en el umbral de la puerta junto a la víctima, a quien le increpaba diciéndole “eres tú quien se ha acostado con mi novia”, le propinó un fortísimo puñetazo en la parte trasera de la cabeza provocando que se cayera al suelo y se golpeara contra el pavimento.

A consecuencia de la agresión, el herido sufrió traumatismo craneoencefálico grave, hematomas, contusiones, epilepsia y trastorno orgánico de la personalidad. Tuvo que someterse a una operación para la extirpación parcial del cráneo y tardó más de año y medio en estabilizarse de sus lesiones que le dejaron secuelas y la previsible incapacidad permanente total.

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