“El albatros negro” tantea su adaptación a la gran pantalla

Aventuras con corsarios, un thriller con asesinatos y una revisión histórica. La novela de María Oruña, “El albatros negro”, cumple con todos los requisitos para dar el salto al audiovisual y así lo confirmó la autora en declaraciones a Atlántico TV. “Yo veo la historia en audiovisual y no es que no estemos hablando del tema, pero es muy caro de producir. Hay que tener en cuenta que meto galeones en la Ría y a toda la flota angloholandesa y la hispanofrancesa, además de crear una ambientación de 1700. El problema es que se me ocurren cosas muy espectaculares que después a la hora de llevarlas al cine resultan muy caras”.

La escritora, que bromeó con presentarse de extra si sale adelante la adaptación a la gran pantalla, presentó ayer una instalación en Príncipe, colgando mariposas sobre la calle para celebrar los 50.000 ejemplares vendidos y la tercera edición en el mercado cuatro meses después de su presentación. “Es una novela que llamó la atención desde el principio y me recuerda a otros libros míos que tienen tendencia a continuar vivos aunque ya no salgan en titulares”. Esta acción coincidió con el éxito en su firma este martes en la Alameda, dentro de la Feria do Libro. “Después de haber presentado y firmado en dos ocasiones en la ciudad, pensé que solo vendrían los que habían quedado sueltos y la verdad es que fue impresionante, ya cerraban la Feria y yo seguía firmando; fue increible, sobre todo por la gente, es lo que más me gusta y me emociona, cuantísima gente está redescubriendo la ciudad, visitando enclaves que tenía olvidados o que realmente no conocía”.

Le sorprende y le gusta que la identifiquen por la calle como una escritora de éxito. “Estoy más acostumbrada a que me reconozcan en eventos literarios, pero no en la vida cotidiana; igual estoy paseando al perro y un corredor se para solo para decirme que ‘muy bien la novela’; me pregunto cómo es posible que me reconozcan con gafas y gorra; pero es agradable, la gente siempre es muy generosa y amable. Me encanta que se paren y me den su parecer”.

Reconoce que al principio estaba un poco nerviosa ante la reacción que tendría los lectores vigueses ante el pasado corsario de la villa. “Es bonito que a través de ‘El albatros negro’ recuperemos un aspecto de nuestra ciudad que va más allá del Vigo playero, del gastronómico o del turístico, es ese Vigo histórico de episodios no tan recientes como ese patrimonio del pasado amurallado y corsario que era muy potente”. Destacó que durante su firma este martes en la Alameda, muchos lectores le comentaban cómo habían descubierto zonas en la ciudad. “O no habían estado nunca o llevaban años sin pasar por la parte de atrás de O Berbés o en la Praza do Peñasco, también les sorprenden las salinas del Lagares, por detrás de Samil; aún quedan los restos de los muros, porque entonces no había neveras y era de allí de donde extraían la sal. Son esas pequeñas cosas que a lo mejor la gente que hace habitualmente esa ruta nunca se había fijado y ahora se convierten en pequeños investigadores”. Asimismo, apuntó que ya empieza a surgir interés entre los visitantes por conocer la ruta literaria de ‘El albatros negro’.

A Oruña no le sorprende ese desconocimiento que los vigueses tienen sobre su propia ciudad. “Yo descubrí muchas cosas que no sabía escribiendo este libro, lo que sí me llama la atención es que en las escuelas no haya ni un solo día para que los niños aprendan historia local. Hablé con varios adolescentes y tampoco conocen estos hechos”.

La escritora compagina la promoción de la novela con la preparación de su siguiente proyecto: “Siempre intento hacer algo diferente. Estoy trabajando con algo que no tiene nada que ver con esto, que supone un reto para mí y una sorpresa para los lectores, los que esperen un nuevo albatros próximamente realmente se van a sorprender. Llevo meses con ello, pero aún queda mucho trabajo”, anunció sin dar más pistas sobre su próxima obra.