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Un brutal accidente registrado en la A-52 se saldó con la muerte del abogado vigués Juan Blanco, de 42 años, y con otras tres personas heridas. Dos de ellas eran la mujer y la hija del fallecido, una bebé de 13 meses, que viajaban en el mismo coche. Las dos heridas evolucionan favorablemente de sus lesiones. El tercer lesionado se trataba del conductor del oto coche implicado en el accidente cuyo pronóstico es grave. En el lugar del siniestro la autovía carece de mediana y sólo hay bolardos.
El siniestro de circulación se produjo sobre las 10.30 horas en el punto kilométrico 290 de esta carretera cuando el BMW 116D en el que viajaba ACD, de 25 años y vecino de Sanguiñeda, en Mos, circulaba en sentido Vigo y se salía de la vía saltándose la medianera pasando al otro lado de la autovía. El turismo chocó frontalmente y con gran violencia contra el Renault Arkona en el que viajaba el letrado con su familia, que regresaban a Madrid, donde residían, después de haber pasado las vacaciones de Navidad en Vigo, de donde eran naturales.
Casi inmediatamente de producirse el choque, el 112 comenzó a recibir numerosas llamadas desde vehículos que circulaban por la autovía, con bastante movimiento en aquellos momentos, informando del choque.
En el choque resultó muerto al instante Juan Blanco, que conducía el coche familiar. Los otros tres heridos fueron trasladados al hospital Álvaro Cunqueiro. El conductor del BMW tuvo que ser excarcelado por los bomberos de Porriño que se trasladaron hasta el lugar del siniestro. Además, fueron enviados al lugar efectivos de la Guardia Civil de Tráfico, del GES-SPEIS de Ponteareas, varias ambulancias del 061 y el servicio de mantenimiento de la vía. El accidente obligó a cortar el tráfico en sentido hacia Ourense, habilitándose por parte de la Guardia Civil de Tráfico un carril de servicio para dirigir los vehículos que circulaban en aquellos momentos por la A-52. Todo ello originó que se formaran durante bastante tiempo grandes retenciones, que en los peores momentos llegaron hasta la entrada a Ponteareas.
“Ha sido muy impactante para todos”, aseguraba ayer Javier Cominges, abogado y compañero del letrado fallecido en accidente de tráfico. Ambos coincidieron en la Asociación de Jóvenes Abogados de Vigo y lo recuerda como alguien “hiperactivo, siempre estaba haciendo algo. Un hombre muy inteligente y un gran profesional, algo que se puede comprobar con la carrera que llevaba”, recuerda. Y es que Juan Blanco era a sus 42 años director de la asesoría fiscal de la empresa naval Navantia, puesto que ocupaba desde marzo del 2021.
Licenciado en la Universidad de Vigo, pronto encaminó su carrera en el área fiscal y tributaria, lo que le permitió ser uno de los grandes impulsores de la Oficina de Intermediación Hipotecaria, que se creó durante los peores años de la anterior crisis, cuando los desahucios aumentaban y muchos perdían sus viviendas al no poder hacer frente a las cuotas hipotecarias. Aquel proyecto tuvo una duración de dos años, en los que Juan Blanco “fue su principal impulsor. Puso mucho de su parte para que saliera adelante y que colaborasen muchos abogados de la ciudad. Era un proyecto claramente social que tenía como objetivo asesorar a las familias y mediar con las entidades bancarias, algo que no cubría el turno de oficio”, explica. La carrera profesional de Juan Blanco le llevó, algún tiempo después, a dejar Vigo y trasladarse a Madrid para incorporarse a su nuevo trabajo. Pese a todo, siempre regresaba a la ciudad con su familia en vacaciones. Juan Blanco además fue integrante del grupo de teatro Albatros, de la Compañía de María y secretario de las Juventudes Socialistas de Vigo.
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