Jimena Meije: “Vigo es una ciudad muy diversa y eso se refleja en nuestra cocina”

Jimena Meije es desde este año la presidenta de la asociación Vigo Gastronómico, que busca promover la cocina de la ciudad a través de sus distintos restaurantes e impulsar actividades para su divulgación.

¿Cómo está siendo su experiencia al frente del proyecto?

La experiencia está siendo muy positiva. Detrás tengo un grupo que me apoya y eso es fundamental. Somos una organización que nació durante la pandemia y desde entonces cambiamos la presidencia cada dos años. Este periodo me toca a mí y estoy encantada.

¿Cuáles son sus principales objetivos?

Nuestro objetivo es poner en valor la gastronomía de Vigo, no solo desde la cocina, sino desde una experiencia completa. Queremos unir cocina, sala, servicio y ambiente. Vigo es una ciudad muy diversa y eso se refleja también en nuestra cocina: hay gente de toda Galicia, de otras zonas de España y del extranjero. Esa mezcla enriquece mucho la gastronomía local.

¿Qué diferencia a Vigo Gastronómico de otras asociaciones?

Hay asociaciones formadas exclusivamente por cocineros. En nuestro caso, además de cocineros, somos propietarios y valoramos todos los elementos que influyen en la experiencia del cliente: la sala, el vino o el servicio. Buscamos una experiencia completa, no solo un buen plato.

¿Nota mayor interés por la experiencia gastronómica?

Sí, claramente. Se dice que Vigo está de moda, aunque no me gusta esa expresión. Las modas pasan. Yo creo que Vigo no es una moda, es una realidad que ha llegado para quedarse. Por eso muchos seguimos apostando por esta ciudad: porque creemos en Vigo y queremos a Vigo.

¿Cuál es la fortaleza de la gastronomía de Vigo?

El producto. En Vigo contamos con carnes, pescados y verduras de una calidad excepcional. La cocina moderna siempre tiene que apoyarse en la tradición y en un buen producto. En nuestros restaurantes trabajamos con producto de proximidad y de temporada, y cada uno aporta su estilo personal.

¿El objetivo es innovar partiendo de la tradición?

Sí. La tradición es la base, y a partir de ahí cada cocinero aporta su sello. El producto es siempre lo primero.

¿Cuántos restaurantes forman parte de la asociación?

Actualmente somos 10, pero en breve prevemos ampliar a entre 15 y 16.

¿Qué iniciativas impulsa Vigo Gastronómico?

Uno de los proyectos principales es ‘Solpor a bocados’, que llevamos organizando desde hace al menos cinco años, con muy buenos resultados. Empezamos con un pequeño barco para unas 20 o 30 personas y el formato ha ido evolucionando. Este último verano hicimos dos salidas, en julio y agosto, con una muy buena acogida. Cuando trabajamos juntos no somos locales distintos, somos una sola propuesta: Vigo Gastronómico. Esa unión es una de nuestras mayores fortalezas.

¿Tienen previsto impulsar otros proyectos similares?

Sí, queremos desarrollar iniciativas de carácter benéfico. Somos una asociación sin ánimo de lucro y ya colaboramos con algunas entidades. Durante la pandemia trabajamos con comedores sociales, aportando alimentos cuando más falta hacía.

¿El turismo aporta más clientes?

El turismo ha crecido mucho. Hace años el verano era una temporada complicada porque la gente se iba fuera. Ahora hay turismo durante todo el año, tanto en verano como en invierno. El público local sigue siendo fundamental, pero el turismo cada vez tiene más peso.

¿Influye la campaña de Navidad en la hostelería?

Sí, se nota un repunte en diciembre, aunque depende de la zona. En mi caso, al estar en la Plaza de Compostela, la mayoría de clientes viene de los hoteles cercanos, sobre todo turistas portugueses. Los mercadillos también aportan movimiento, y todo lo que genere actividad beneficia a la ciudad.

Divulgan la cocina de Vigo en redes sociales. ¿Funcionan como herramienta de promoción?

Sí. Intentamos difundir las propuestas de cada local para mostrar la diversidad que hay en Vigo.