Inés Túnez e Iván Fernández: “Esperamos que con este premio más gente se anime a apuntarse a debate en la Uvigo”

La asociación Retórica de la UVigo ganó la Liga Española de Debate Universitario el domingo en Melilla con un equipo formado por Tomás Aparicio, Inés Túñez, Iván Fernández y Jesús Gómez; y Laura Bacariza, Juan Calderón y Laura Leirós como suplentes. Para ello tuvieron que prepararse posturas a favor y en contra sobre la pregunta “¿Es conveniente el decrecimiento para solucionar los problemas medioambientales y las desigualdades sociales?”

¿Cómo se prepara un debate de estas características?

Iván Fernández: Lo primero es hacer una investigación en profundidad sobre la materia. Nos ponemos a buscar cada uno por separado, para no sesgar con las ideas de los demás, en artículos científicos, revistas, artículos universitarios y una vez tenemos una idea de cómo va el tema nos juntamos, damos la opinión de qué posición nos parece más fácil, cuál más difícil y qué argumentos nos parecen los más intuitivos para defenderlo y a partir de ahí ir desarrollándolos y defendiéndolos. Hacemos debates para ver si los argumentos se caen y vamos puliéndolos hasta que llegas al torneo final e intentamos que los demás no nos los tiren.

¿Cómo funciona este sistema de debate universitario?

Inés Túñez: Son equipos de 4 personas. Una de ellas hace la introducción, que es presentar cómo respondes a la pregunta. Luego iría el introductor del equipo contrario. Después van los dos refutadores de cada equipo. Ahí ya no sólo terminas de explicar tu postura, sino que también atacas la línea del equipo contrario y demuestras en base a evidencias o razonamientos por qué lo suyo no es cierto o por qué lo tuyo tiene más relevancia. Y para cerrar lestá el turno de conclusión, que sirve para explicar qué ha sucedido a lo largo del debate y terminar de decantar por qué lo que se dijo va a hacer que tu equipo gane o no.

¿Cómo vivieron esa experiencia en la fase final de Melilla?

I.T.: Fue intenso. Empezamos mal porque perdimos el primer debate, que fue contra el equipo con el que nos enfrentamos en la final. Tuvimos muchos nervios por si nos caíamos en fase de grupos, que fue lo que nos pasó el año pasado y estábamos reviviendo esos momentos. Pero al final ganamos esos otros dos debates contra todo pronóstico porque no teníamos muchas esperanzas en alguno de ellos. En cuartos de final y semifinales lo vivimos con mucha intensidad porque sabemos que no hay otra oportunidad.

¿Se diferenciaron mucho los dos enfrentamientos que tuvieron contra el equipo de la Universidad Carlos III?

I.F.: Se diferenciaron sobre todo en la calidad de los debates porque intercambiamos las posturas. Nosotros hicimos el primer debate a favor y el último, en contra. A lo largo de todo el torneo fuimos perfeccionando mucho la línea que llevábamos y mejorando mucho como equipo. Era la primera vez que participábamos juntos los cuatro. Entonces el torneo hizo progresar mucho tanto al equipo como a nuestros argumentos y en el último debate se notó muchísimo que el trabajo era mucho más coordinado y cada uno sabía lo que tenía que hacer a la perfección y confiaba en los demás. Creo que eso fue lo que hizo que decantáramos la balanza a favor.

¿Ven que hay interés por el debate en la UVigo?

I.T.: Este año estamos todavía en fase de captación de nuevos integrantes y estamos deseando conocer a la gente que este año tenga interés en formar parte de la asociación porque de buenas a primeras no suele ser algo que llame demasiado la atención. A ver si este premio anima más a la gente a unirse porque la asociación te forma en muchos ámbitos, tanto social como académico. Aprendes muchas 'soft skills' que ahora están muy demandadas. A ver si con este premio la gente ve que la asociación existe y se anima a formar parte de ella.

¿Qué beneficios aporta esta disciplina del debate universitario?

I.F: Yo creo que lo que más te aporta es un desarrollo personal que no puedes encontrar en otra disciplina. Al ser un formato deportivo a nivel académico y mixto te prepara mucho para lo que te vas a encontrar en el futuro profesional. Además, te obliga a buscarte la vida por tu cuenta. En un debate, tienes un tema pero nadie te dice cuánto tienes que investigarlo ni lo que hace falta para ganar. Es un mundo muy intenso en el que se hacen amistades preciosas y también acabas viajando por toda España a sitios a los que no visitarías normalmente. Y a nivel profesional, se valora mucho. Las empresas valoran que tengas un recorrido extracurricular y que hables con más soltura.

¿Qué le dirían a compañeros que dudan de si iniciarse o no en el debate?

I.T: Que se animen, que toda persona tiene su lugar dentro del debate. No sólo es un entorno competitivo, haces muchas amistades. Yo empecé siendo muy tímida y me costaba hablar en público y he notado muchísima mejoría a nivel personal.

I.F: Estar en una asociación con un nivel de formadores de la talla que me enorgullezco de decir que ahora tiene Retórica, con personas como Inés es algo que no todo el mundo puede tener. Muchas universidades tienen asociaciones que no tienen la experiencia suficiente o son muy nuevas. Sabiendo que la asociación tiene ahora este nivel, que puede que no dure para siempre, que aprovechen, se acerquen y traten de sacar el máximo valor posible de la asociación y que no duden en apuntarse a una actividad que van a agradecer el resto de su vida.