Enrique Mallón: “El sector del metal gallego vive un momento muy bueno”

Vigo se convertirá en pocos días en capital internacional de la industria metalúrgica con la celebración de la feria Mindtech, impulsada por Asime, que celebrará su cuarta edición en Ifevi del 17 al 19 de junio. Su director y secretario general de la patronal del metal gallego, Enrique Mallón, hace balance para Atlántico de la situación actual de esta industria, que representa casi el 20% del Producto Interior Bruto de Galicia (PIB).

¿Qué previsiones manejan para este año con la feria Mindtech?

Somos muy optimistas, tenemos muchísimas más inscripciones que en ediciones anteriores y a nivel de expositores también estamos en el número máximo con más de 200. Hay un momento de actividad muy bueno en el metal y en toda la industria en general junto con una gran revolución tecnológica.

¿Cuál es el punto fuerte de la edición de este año de la feria?

La filosofía de la feria, que es esa unión entre las nuevas tecnologías y la industria tradicional, ver cómo el avance de la tecnología nos permite ser más eficaces, eficientes y competitivos. Va a destacar la industria de la seguridad y defensa, la automoción y las energías renovables, por citar algunas de las áreas más potentes de esta edición y tendremos una gran presencia internacional con 15 delegaciones. México es el país invitado.

Ya es una feria que está consolidada y con gran proyección internacional en solo 4 años.

Sí, está muy consolidada. Está reconocida por el Gobierno de España como feria internacional y eso solo se produce cuando realmente hay una historia que así lo respalda. Es bueno para Galicia y para Vigo que exista Mindtech.

Hablemos del sector, ¿cómo es la situación actual en líneas generales de la industria del metal en Galicia?

Tanto en España como en Galicia está con un alto nivel de ocupación, superamos el 90% de nuestra capacidad productiva. Tenemos unas buenas perspectivas para este año y para el próximo. Quizás el área que presenta una mayor incertidumbre es el de la automoción, pero dependemos en gran medida de esta industria para tener un sector sólido.

El sector está a la espera de que el nuevo CEO de Stellantis, Antonio Filosa, desvele su política con respecto a los proveedores ¿Cuál es el sentir de la industria auxiliar gallega?

Desde Asime llevamos años diciendo que Stellantis y otros fabricantes si quieren apostar realmente por una industria española y gallega potente tienen que intentar que los proveedores de primer y segundo nivel sean adjudicatarios en gran parte de los modelos. No podemos sostener una industria competitiva si no hay adjudicación de proyectos. Obviamente, no todos, nunca va a ser el 100%, ni pretendemos eso, pero sí queremos que esa apuesta que hace el gobierno gallego y el local por factorías como la de Stellantis se vea traducida también en una mayor adjudicación a los proveedores gallegos.

¿Cuál diría que es la actividad del metal con mejor proyección a corto o medio plazo?

La número uno, sin duda alguna, para nosotros es la industria de seguridad y defensa. Es muy competitiva, hay que adentrarse poco a poco, pero va a aportar mucha carga de trabajo a Galicia, a España y a toda Europa por las decisiones que se han tomado. En segundo término está la industria aeroespacial y también la eólica marina y confiamos en continuar con un nivel bueno como el actual en el naval y el sector marítimo.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acaba de anunciar una subida de aranceles para el acero y aluminio. ¿Cómo lo valora?

Muy negativamente. En Galicia no somos grandes exportadores de estas materias primas, pero sí de sus derivados, que enviamos tanto a Estados Unidos como a países europeos que finalmente destinan sus productos a EE UU. Por lo tanto, nos va a afectar. Sí es cierto que somos moderadamente optimistas en el sentido que creemos que Estados Unidos no va a poder mantener mucho tiempo esta política porque va a perjudicar también a su mercado y confiamos en que estas decisiones del Gobierno de Trump se modifiquen en los próximos meses y no tengamos este panorama actual que es malo para el comercio internacional y también para el gallego.

¿Están llegando las ayudas de los Perte a las empresas?

Sí, pero la industria pretendía una mayor permeabilidad. Algunos de estos Perte han tenido como destinatarios principales a grandes empresas y respecto a las pymes todavía hay una tarea pendiente donde debemos entre todos intentar ayudar a que permeabilicen más a estas pequeñas y medianas empresas gallegas.

Desde Asime han comentado en diversas ocasiones que se echa en falta una gran inversión en Vigo en materia de industria. Hace poco el grupo chino Citic hizo público su proyecto para invertir aquí. ¿Cómo lo valora?

Es cierto que es una tarea pendiente de Galicia y de Vigo atraer más inversión sobre todo en industria. El grupo Citic quiere apostar por Galicia, eso es muy bueno y lo que tenemos que hacer es ofrecer nuestras ventajas competitivas que son sobre todo el conocimiento técnico, tecnológico e industrial que tiene el área viguesa. Lógicamente, los inversores precisan de más cosas como es suelo industrial competitivo y costes aquilatados. Hay que facilitar suelo industrial a las empresas si queremos que lleguen inversiones de calado.

¿Sigue habiendo fuga de empresas gallegas a Portugal como en los últimos años?

No. Los que ya están asentados en Galicia saben que esta comunidad y en concreto Vigo es un área muy competitiva donde puedes obtener y conseguir prácticamente todos los productos y servicios que demandas y eso es una ventaja respecto a otros territorios. De todos modos, instamos a las administraciones públicas a que trabajen intensamente en la agilidad burocrática porque se necesita facilitar la llegada de nuevos inversores como está sucediendo en otros territorios de Europa.

¿Está contratando trabajadores la industria metalúrgica en estos momentos?

Es fundamental para el sector atraer a trabajadores, también de otros países, especialmente de Latinoamérica, algo que ya estamos haciendo. Pero hay un asunto muy importante que nos preocupa mucho y es la lucha contra una lacra que estamos sufriendo las empresas que es el absentismo laboral. Hay unos niveles de absentismo absolutamente inasumibles con los que la industria no puede ser competitiva. Creo que por fin las administraciones se están dando cuenta de esta situación porque está perjudicando también a las arcas del Estado.