Proteger la privacidad, un desafío ante el avance de los hackers

Proteger los datos personales de empresas y particulares es uno de los grandes desafíos tecnológicos al que se enfrenta la informática y las comunicaciones en 2022.

Según el “Informe sobre predicciones globales de ciberseguridad 2022” de la empresa de seguridad digital Check Point Software, se observa que los hackers seguirán aprovechando el impacto de la covid, pero también sacarán partido de nuevas oportunidades como los “deepfakes” (la sustitución de caras y voces para engaños altamente realistas), las criptomonedas o los monederos virtuales.

En los últimos meses ha aumentado significativamente el número de ataques de “ransomware” (secuestro de datos para pedir un rescate) y ataques móviles a teléfonos inteligentes. Las empresas deben ser conscientes de los riesgos que este tipo de ataques conlleva, y deben asegurar de que cuentan con las soluciones adecuadas para prevenir este tipo de situaciones.

Los grupos de ciberdelincuentes seguirán aprovechando a lo largo de 2022 las campañas de noticias falsas para ejecutar diversos ataques de “phishing” (correos y mensajes que piden datos personales, números de tarjeta de créditos y contraseñas) y estafas. Además, los hackers intensificarán la “guerra fría” cibernética e incrementarán sus ciberataques a las cadenas de suministro, lo que conllevará problemas a la hora de realizar pagos, obtener productos o mantener una dinámica de producción en las líneas de montaje.

Otro de los problemas que conlleva el uso no seguro de las comunicaciones virtuales son las filtraciones de información, que serán más frecuentes y a mayor escala incluso a nivel personal. También se espera que las criptomonedas, de nuevo en auge entre todo tipo de inversores, y dispositivos móviles, cada vez más en auge a la hora de realizar pagos por internet o de manera “contactless” capten cada vez más la atención de los malhechores digitales.