El papa León XIV exige el fin de la barbarie en Gaza tras el ataque a la parroquia católica

El papa León XIV condenó con firmeza el ataque del ejército israelí contra la parroquia católica de la Sagrada Familia en Gaza, que dejó al menos tres muertos y varios heridos. Exigió el “cese inmediato de la barbarie” en la Franja y advirtió que “el mundo ya no aguanta más”. El Pontífice calificó el ataque como uno más de los “continuos” atentados contra la población civil y los lugares sagrados de la zona, denunciando que la situación en Gaza es una “herida abierta” para toda la humanidad.

Tras el Ángelus en Castel Gandolfo, León XIV recordó a las víctimas por su nombre y expresó su cercanía a las familias afectadas. Reiteró su rechazo a los ataques contra civiles y templos en Gaza, reclamando una salida pacífica al conflicto.

El Papa pidió a la comunidad internacional el respeto al derecho humanitario y la condena al castigo colectivo, el uso indiscriminado de la fuerza y el desplazamiento forzado. Subrayó que la protección de los inocentes es un deber moral irrenunciable y que ninguna guerra puede justificar la violencia contra los más vulnerables.

Dirigiéndose a los cristianos de Oriente Medio, reconoció su sentimiento de impotencia ante la tragedia, asegurándoles que están en su corazón y en el de la Iglesia. También instó a orar por la paz y urgió a las partes en conflicto a “sentarse a dialogar y deponer las armas”.

Respecto a su reciente conversación con Benjamin Netanyahu, el Papa recalcó la importancia de proteger los lugares sagrados y poner fin al odio y la violencia. Advirtió que la situación actual carece de justificación moral y reclamó valentía política para buscar una salida negociada al conflicto.

Por su parte, el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, puso en duda la versión oficial israelí que atribuye el ataque a un accidente. Exigió una investigación exhaustiva y advirtió que la impunidad solo aumentará el sufrimiento civil y minará aún más la credibilidad de la comunidad internacional.