Ellos también hicieron humor usando el Holocausto o ETA
POLÉMICA
Rescatamos ejemplos de comediantes que, visto lo visto, tendrían complicado hacer carrera en la política española
La resurrección de unos viejos chistes del nuevo edil de Cultura de Madrid sobre el Holocausto o Irene Villa desataron una fuerte polémica. Los partidos mayoritarios piden la dimisión del autor, Guillermo Zapata, al que parece que no le va a valer pedir disculpas ni explicar el contexto de la acción (esas bromas fueron lanzadas vía Twitter en 2011, unos días después de que El País despidiese a Nacho Vigalondo por unos tuits del estilo), que venía enmarcados en un viejo debate: ¿debe el humor tener límites?.
Una discusión que dura décadas, y que alcanzó máxima relevancia con las famosas viñetas de Mahoma y el ataque terrorista a la sede de Charlie Hebdo, revista icónica para sus seguidores precisamente por hacer eso, estirar los límites de la comedia, en una acción compartida por otros comediantes de referencia como los que aquí citamos. ¿Humor o falta de respeto? Lo que es seguro es que lo tendrán complicado para hacer carrera política.
Sarah Silverman y el Holocausto
¿Un par de tuits sobre el Holocausto?
Vaya Semanita y ETA
Indiscutiblemente, los mejores momentos de Vaya Semanita, el mítico programa de humor de la ETB, fueron a costa de ETA. Como la reserva de terroristas, el perro abertzale o Los tres de Oiartzun.
Chris Rock y los atentados de Boston/ 11-S
Con un montón de monólogos sobre el racismo y otros temas controvertidos, Chris Rock es otro de los humoristas americanos más afilados. Lo volvió a demostrar en el Saturday Night Live.
Louie C.K. y la violación
Siempre a la contra y cuestionando los valores de la sociedad occidental, a Louie CK no le tiembla el pulso a la hora de bromear sobre una violación, la conquista de América o aprovechar la apertura del SNL para tratar el racismo y la pederastia.
Bill Hicks y matar a Billy Ray Cyrus, y la homosexualidad, y los pro-vida, y la religión...
Ricky Gervais y los límites del humor
Volvemos al Holocausto para cerrar, con uno de los maestros de la irreverancia, un Ricky Gervais que tiene una famosa intervención en la que explica su postura acerca de si se le deben poner límites al humor. Si conocéis algo de la obra del creador de The Office, os podéis imaginar su respuesta.
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