La Constitución y el Quijote como legado del estreno de la princesa

Algo nerviosa, aunque sonriente tras la mascarilla, la princesa Leonor protagonizó a sus 15 años su primer acto oficial en solitario en la sede del Instituto Cervantes de Madrid, un estreno en el que dejó como legado para la historia un ejemplar de la Constitución y otro del Quijote. Ambos símbolos los depositó en la Caja de las Letras de la cámara acorazada de la sede de la entidad cultural en presencia de su director, Luis García Montero, y de la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo.

El cajetín reservado para la heredera al trono fue el 2021, ubicado entre el del médico Severo Ochoa y el escritor Miguel Delibes. Tras introducir los dos ejemplares, García Montero entregó ayer a la princesa la llave de la caja, en la que su recuerdo tiene carácter permanente, a diferencia de la mayoría de ilustres que depositaron su legado desde 2007. "Gracias a todos los trabajadores del Instituto Cervantes por estos 30 años", afirmó la princesa de Asturias en referencia al aniversario que este año conmemora el organismo.