Las citas más allá del diagnóstico: prosperar a pesar del VHS

Al igual que sucede con las enfermedades de transmisión sexual, un diagnóstico positivo de una infección de transmisión sexual suele acarrear una gran de carga de ansiedad y miedo a la persona que lo recibe, en especial en cuanto al futuro de su experiencia social y sexual; este es el caso del herpes.

Si tener una cita puede ser de por sí una situación íntimamente intensa, el factor añadido de saber que, eventualmente, tendrás que hablar sobre tu ITS, puede resultar abrumador; aunque no tiene por qué ser así: por un lado, hay maneras de afrontar esa conversación sin que represente un peso para ti; por otro, siempre cuentas con la posibilidad de conocer a tu próxima cita en una de las tantas plataformas de citas para personas con herpes, como PositiveSingles.com.

Rompe el estigma: el herpes en detalle

El virus de herpes simple (VHS) es una infección de transmisión sexual sumamente común en todo el mundo, de muy fácil transmisión, que puede aparecer en una de sus dos variantes, oral (VHS-1) o genital (VHS-2) y que se contagia por el contacto de piel a piel.

Es una infección intermitente, en el sentido de que sus síntomas se alternan entre periodos activos e inactivos, que puede ser tratada con medicamentos antivirales (entre otros) para reducir la frecuencia, duración y gravedad de los episodios o sarpullidos, pero que, al menos por el momento, no cuenta con una cura.

Si bien esto último, es decir, la inexistencia de una cura, puede generar una sensación de pesar y angustia, es importante recalcar que una persona puede vivir una vida completamente normal y sexualmente activa con un diagnóstico positivo de VHS.

Esto, siempre y cuando mantenga un estilo de vida saludable, siga con determinación las indicaciones de sus médicos, se realice los estudios pertinentes con regularidad y, sobre todo, tome las medidas necesarias para mantener relaciones sexuales seguras para reducir, tanto como sea posible, el riesgo de contagio.

Las citas más allá del herpes

Uno de los primeros pasos que debes dar para volver al ruedo de las citas luego de recibir tu diagnóstico de herpes es informarte tanto como puedas.

En efecto, es importante que comprendas al detalle lo que implica tu infección, tu tratamiento, tus medicamentos y tu riesgo de contagio, no solo para poder responder a las preguntas de tu cita, sino también por tu propio bienestar.

El riesgo de contagio de herpes: cómo mitigarlo

Tanto el herpes genital como el oral comparten características similares: ambos se contagian por contacto de piel a piel, ambos presentan síntomas intermitentes, y en ambos casos estos incluyen la aparición de ampollas acompañadas de una fuerte sensación de dolor o picazón.

Una de las primeras recomendaciones que se dan en cuanto a mantener relaciones sexuales con herpes es esperar a pasar por un periodo asintomático, es decir, a no tener ampollas o sarpullidos visibles.

La siguiente recomendación es siempre utilizar preservativos para practicar sexo anal o vaginal, y, adicionalmente, barreras bucales de látex para el sexo oral. Si bien los síntomas suelen manifestarse en la boca o en los genitales (según el tipo de VHS de que se trate), estos pueden aparecer en zonas circundantes.

El contacto de piel a piel con zonas afectadas siempre implica un alto riesgo de contagio, y es la razón por la que es conveniente esperar a pasar por una etapa asintomática antes de mantener relaciones sexuales.

Estas recomendaciones, en todo caso, no eliminan el riesgo de contagio, pero sí lo disminuyen en gran medida.

Otro factor fundamental, que no se relaciona únicamente con el sexo, sino más bien con la calidad de vida, consiste en mantener hábitos saludables de alimentación e higiene y, sobre todo, seguir rigurosamente las instrucciones y los tratamientos antivirales recetados por los médicos.

Hablar con tu pareja: un paso adelante

Según datos de la Organización Mundial de la Salud, más de 3.700 millones de personas en todo el mundo sufren del VHS en alguna de sus formas.

En otras palabras, se trata de una ITS sumamente común, a pesar de lo cual el estigma y los prejuicios siguen siendo, hoy en día, uno de los principales factores perjudiciales para el bienestar social de las personas diagnosticadas con herpes.

¿Tienes que hablar sobre tu ITS en tu primera cita? No necesariamente, a menos que planees tener relaciones sexuales con tu cita, o besarla, en cuyos casos sí que es tu responsabilidad hablar sobre el tema.

La manera en que lo abordas dependerá de un sinfín de particularidades, en especial respecto a tu propia personalidad y al contexto de tu cita, pero, a grandes rasgos, es recomendable elegir un ambiente relajado en el que puedas hablar cómodamente.

Si bien no tienes por qué prepararte para una reacción ilógica, si sería normal que la otra persona tenga preguntas: sobre el herpes, sobre las posibilidades de contagio, sobre tu tratamiento.

Por esta razón (entre otras que ya hemos mencionado) es importante informarte a fondo sobre el VHS, para poder responder tranquilamente a las preguntas de tu cita y así transmitir calma y seguridad respecto al tema.

Otra posibilidad, por supuesto, es utilizar una plataforma de citas para personas con ITS y ETS, en donde las infecciones y enfermedades de transmisión sexual dejan de ser tabú, lo que las hace mucho más fácil de afrontar en una conversación.

En cualquier caso, vivir una vida social y sexualmente activa con herpes es perfectamente posible: basta con cuidarse, informarse y seguir las indicaciones médicas, y recordar en todo momento que no hay nada mal contigo, para poder experimentar una vida plena y llena de todo eso que estás buscando.