Un albino recupera su rostro, el último milagro de Cavadas

Sociedad

El cirujano valenciano intervino con éxito múltiples cánceres de piel de un guineano de 30 años

agencias

Publicado: 13 mar 2021 - 01:17 Actualizado: 14 mar 2021 - 00:51

El guineano Reginaldo Carlos Mguema junto al cirujano valenciano Pedro Cavadas.
El guineano Reginaldo Carlos Mguema junto al cirujano valenciano Pedro Cavadas.

Reginaldo Carlos Mguema, un guineano con albinismo de 30 años al que Pedro Cavadas operó de múltiples cánceres de piel, asegura que, cuando subió al avión rumbo a España, recuperó "la esperanza" que pensó había perdido, una vez que le dijeron en su país que no podían operarle. Este paciente, que estudiaba Pedagogía en su país, donde el albinismo es "un problema muy serio que equivale a desarrollar cánceres de piel" y a quien ahora se le ha "regalado una vida", habría muerto "miserablemente en menos de un año" si no hubiera sido intervenido, según remarcó Cavadas.

Reginaldo, que fue intervenido en tres ocasiones, la primera el pasado 28 de diciembre, y en una de ellas precisó una reconstrucción microquirúrgica compleja en la cara debido a un cáncer muy extenso, pidió ayuda en redes sociales cuando en su país fue diagnosticado y le dijeron que no había maquinaria para operarlo. Tras exponer su caso a la Fundación Cavadas y a la embajada de España en su país, donde solicitó el visado, gestionó él mismo el vuelo y se arriesgó a venir hasta Valencia sin una cita previa con los médicos. Semanas después, fue sometido a la primera operación.

El albinismo es una enfermedad genética que impide la fabricación correcta de melanina, el protector solar endógeno del cuerpo, y en pacientes de raza negra "es relativamente frecuente", según Cavadas, quien expuso este caso a los medios acompañado del paciente y del dermatólogo Luis Hueso.

Según el cirujano valenciano, en el cáncer más extenso de la cara, hizo "dos zafarranchos de quitar docenas de epiteliomas, porque tenía tumores de piel múltiples". Durante la intervención del cáncer más extenso le quitó un tumor maligno que invadía el esqueleto de la cara, el nervio facial, los músculos de masticación y que llegaba al interior de la boca, y luego se reconstruyó. De hecho, tiene una movilidad bastante buena de la cara.

Además, se transfirió piel con músculos para reconstruir el nervio facial con microcirugía. A juicio del cirujano, lo "noticiable" no es la cirugía, de la que posiblemente habrá que realizar más, sino el "tipo de paciente", ya que los albinos generan en el África subsahariana "toda una suerte de animadversiones culturales ancestrales".

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