Conchas de peregrinos y agua por una solidaridad eterna

La Asociación de Amigos de la Pontevedrada (Asampo), repartió por el Día de Galicia más de mil conchas de peregrinos y otro tanto de botellas de agua a los caminantes que cruzaron la Boa Vila. Y lo hicieron en señal de agradecimiento por su esfuerzo y para visibilizar la importancia de la donación de órganos, tejidos y sangre.

El presidente del colectivo, Fran Pérez-Mirás Miguéns, explica que es una actividad que realizan todos los años y en esta ocasión se unieron también miembros de la asociación Libélula BCS, formada por supervivientes de cáncer de mama, de Alcer (Asociación para la lucha contra las enfermedades del riñón), y Ultreia.

Los voluntarios comenzaron este gesto a las 7.00 horas y finalizaron en torno al mediodía, con el objetivo cumplido de reconocimiento a una labor altruista y también haciendo de guías a algunos de los peregrinos que recibían los obsequios con sorpresa y gratitud.

Asampo se conoce en la Boa Vila por la organización anual de la Pontevedrada, el reto de recorrer los 67 kilómetros del Camino entre Pontevedra y Santiago en una sola noche. ¿Para qué? Tal y como reza su lema: "Yo doy, tu das, ellos viven. Deja tus órganos al final del Camino para que otras personas puedan terminar el suyo".

Isabel Lema, superviviente de cáncer de mama

Isabel Lema (Sela), es miembro de la asociación Libélulas, un grupo de 17 mujeres valientes que superaron o están en proceso de un cáncer de mama y decidieron apostar por el Dragón Boat, un deporte acuático de origen chino que consiste en carreras de embarcaciones con forma de dragón, donde se rema al ritmo de un tambor.

Sela explica que "pretendemos visibilizar esta actividad porque con ella mejoran las personas que han padecido el cáncer de mama, ya que mejoramos a nivel muscular de las secuelas que nos quedan, pero también psíquicamente porque con la enfermedad hay un antes y un después".

Para esta mujer, la práctica del deporte y el compartir su estado con otras personas en su misma situación le supuso una gran ayuda. Por ello, ayer también quisieron estar presentes en esta iniciativa solidaria, para darse a conocer y lograr apoyos.

Libélulas nació en 2022 y en 2023 "creamos equipo y fuimos creciendo poquito a poco", afirma Sela. "Hemos creado el equipo BCS, de supervivientes de cáncer de mama y ahora mismo tenemos creado el PD2, en el que la mitad de la tripulación tiene que tener una discapacidad y estamos intentando abrirnos a todas las mujeres que hayan pasado cualquier tipo de cáncer", explica.

Para sela, la superación de la enfermedad "fue dura, pero estar en Libélulas me ayudó mucho. Hablar de lo que nos está pasando, de los problemas que hemos tenido a lo largo del proceso y tener todas un objetivo común, que es palear en el agua y disfrutar, es muy importante".

Isabel Lema lanza un mensaje a las personas que lo necesitan: "Estamos en el Club Naval haciendo jornada de puertas abiertas todos los domingos de 10.00 a 11.00 horas para que todas las mujeres que hemos pasado cualquier tipo de cáncer conozcan la actividad y a nosotras".