El PP pretende la reagrupación del centro derecha por dos vías, la más evidente es mediante la opa hostil que ha lanzado sobre Ciudadanos. La otra es tratar de atraer a Vox de nuevo al redil. A pesar de las palabras de Pablo Casado del “hasta aquí hemos llegado”, hay miembros del PP que no paran de tender puentes. La primera, por supuesto, la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, cuyo mensaje se confunde con el de Vox sin ningún género de dudas. Y luego están los diputados y senadores que con sus declaraciones demuestran que muy bien podrían estar en el PP. El diputado que gritó a Iñigo Errejón “Vete al médico” cuando defendía un incremento de las políticas de salud mental, y el senador que le espetó a la ministra de Trabajo, Yolanda Diez que las mujeres de Podemos ascienden “agarradas a una coleta” son de representantes que han perdido el norte.
Por ese camino la reagrupación de la derecha está más cerca de lo que parece. Pero habrá perdido el centro.
Por ese camino la reagrupación de la derecha está más cerca de lo que parece. Pero habrá perdido el centro.
