Ventura, el líder de Chega no puede cerrar la campaña lusa
Disparado en los sondeos, sufre una indisposición en un acto un día después de salir del hospital
El líder de Chega, André Ventura, volvió ayer a retirarse de un acto de campaña tras sufrir un nuevo episodio de malestar, apenas 24 horas después de salir del hospital. Por consejo médico, Ventura no apurará hasta el final una campaña electoral que decidirá el domingo al próximo presidente. El incidente ocurrió durante un acto en Odemira, en el sur de Portugal, donde Ventura ofreció declaraciones a los medios antes de mostrar signos evidentes de malestar, llevándose la mano al pecho. Fue asistido por su equipo de seguridad, que evitó que cayera al suelo, y atendido en el lugar por una ambulancia de emergencia.
Este nuevo episodio se suma al sufrido el martes en Tavira, también durante un mitin, cuando interrumpió bruscamente su discurso. Lo trasladaron en ambulancia al Hospital de Faro, donde permaneció ingresado unas once horas. Según el diagnóstico, presentó un cuadro de hipertensión asociado a un reflujo esofágico. El miércoles por la mañana salió del hospital por su propio pie, sin hacer declaraciones, aunque compartió en redes sociales que estaba siendo “muy bien tratado”.
El líder de Chega en la Asamblea, Pedro Pinto, aseguró que el ingreso fue solo por recomendación médica y afirmó: “No se preocupen, que vamos a ganar las elecciones del 18 de mayo”. Chega llega a la recta final como tercera fuerza política en buena parte de las encuestas, que apuntan a un escenario muy reñido entre el bloque conservador de Luís Montenegro y el Partido Socialista de Pedro Nuno Santos, aunque otros sondeos publicados estos días en medios de comunicación le dan como ganador. La formación de Ventura aspira a consolidarse como fuerza clave en un Parlamento donde, en el peor escenario demoscópico, podrían ser necesarios para formar gobierno en el país vecino, algo que aumenta la presión sobre su figura y su estado de salud en esta fase crucial.
Portugal vuelve a votar en unas elecciones el domingo
Los portugueses vuelven a las urnas en un momento de inestabilidad política y con un escenario abierto, aunque las encuestas están dando ventaja al partido conservador que ha estado en el Gobierno. La última legislatura ha durado poco más de un año, el Gobierno cayó cuando el primer ministro en funciones, Luis Montenegro, fue acusado por un conflicto de intereses con sus empresas familiares. A estas elecciones acuden los mismos candidatos y el resultado está en el aire aunque las encuestas dan cierta ventaja a la derecha. La convocatoria anticipada se produce tras una moción de confianza que el Ejecutivo no superó, generando incertidumbre sobre la estabilidad futura del país. Además, el aumento en la abstención puede influir en el desenlace.
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