Putin advierte que la guerra pasa a ser un conflicto global

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseguró ayer que, después de que las Fuerzas Armadas ucranianas atacasen territorio ruso con misiles de largo alcance suministrados por Occidental y con el visto bueno de Estados Unidos, la guerra en Ucrania se tornó en “un conflicto global”. “A partir de este momento, como hemos subrayado repetidamente, el conflicto en Ucrania, anteriormente provocado por Occidente, ha adquirido elementos de carácter global”, señaló un Putin que, durante un breve discurso a la nación, confirmo los ataques ucranianos, que aún no son oficiales por parte de Kiev.

Así las cosas, Putin detalló que los ataques ucranianos -el martes con misiles estadounidenses Atacms y ayer con los británicos Storm Shadow- iban dirigidos contra objetivos militares en las regiones de Briansk y Kursk, ambas fronterizas con Ucrania, si bien no lograron su objetivo.

En medio del aumento de las tensiones, el presidente Putin aprovechó para ratificar la nueva doctrina nuclear, mientras que las Fuerzas Aramdas de Rusia lanzaron ayer un nuevo “sistema de misiles de medio alcance” denominado Oreshnik contra “una instalación del sector militar ucraniano”, según confirmó el mandatario.

“Estamos realizando pruebas de combate del sistema de misiles Oreshnik en respuesta a las acciones agresivas de los países de la OTAN hacia Rusia”, aseveró Putin, que subrayó que Moscú responderá “con decisión y de forma espectacular” ante una “escalada de acciones agresivas” en su contra.

Nuevos ataques

Las Fuerzas Armadas de Rusia lanzaron ayer una nueva batería de misiles sobre distintas zonas de Ucrania, entre ellos un misil balístico intercontinental con el que buscaban atacar infraestructuras críticas y empresas de la ciudad de Dnipró, situada en el este del país. La Fuerza Aérea ucraniana confirmó el lanzamiento de un misil balístico intercontinental desde la región rusa de Astracán y otros siete proyectiles de crucero sobre Dnipró. Según el balance oficial los sistemas de defensa de Ucrania lograron derribar seis de estos últimos misiles.

El gobernador regional, Sergei Lisak, confirmó daños en edificios civiles, entre ellos un centro que atiende a personas con discapacidad y varias empresas. Al menos dos personas resultaron heridas por los ataques, denunció en su cuenta de Telegram. Posteriormente, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, confirmó que todos los parámetros -”altitud” y “velocidad”, entre otros- coinciden con los de un proyectil de estas características y valoró la utilización de este misil por parte de Rusia como una muestra del “miedo” que siente en estos momentos del conflicto.