Israel asfixia a Gaza: sin agua ni comida bajo la lluvia de bombas

Las fuerzas armadas israelíes se centran en localizar y bombardear a miembros de las unidades de élite de Hamás, pero aún no se ha decidido si próximamente pasará a una operación terrestre, informó ayer un portavoz del Ejército hebreo. El ataque lanzado por sorpresa por Hamás fue planificado por unidades selectas, conocidas como Nukba (Élite) informó el teniente coronel Richard Hecht. Y explicó: “Ahora estamos centrados en hacer pagar a Nukba el precio. Estamos centrados en identificar a esa gente, entender sus redes y centrarnos en sus infraestructuras. Planificamos acabar con cada uno de ellos, nuestro espionaje se dedica a identificarlos y acabaremos con cada uno de ellos. Pagarán con su vida”.

También continúan combates esporádicos con milicianos en territorio israelí. “Aunque estamos limpiando la zona, todavía es zona de guerra y tardaremos un rato en completar la limpieza”, dijo Hecht.

La invasión terrestre de Gaza no está decidida, según el portavoz: “Estamos preparándonos para la próxima fase de la guerra. No se ha decidido aún una operación terrestre, Eso depende de los líderes políticos”.

Israel confirmó que los bombardeos sobre Gaza son mayores que nunca antes, aunque niega que se trate de golpes masivos e indiscriminados. Se sigue avisando a los habitantes de un edificio residencial antes de bombardearlo, para dar tiempo a evacuarlo, dicen los israelís. Testimonios de Gaza indican que esta práctica, habitual antes, no se está observando en los últimos días. Medios internacionales, citando fuentes de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), informaron de que Israel lanzó 6.000 bombas, unas 4.000 toneladas de explosivos, sobre la Franja de Gaza en los seis primeros días de hostilidades.

Los muertos en la Franja suman 1.203, según los últimos datos del Ministerio de Salud gazati.

Por su parte, el Ministerio de Sanidad israelí comunicó ayer que 406 personas estaban hospitalizadas, de un total de 3.391 heridos registrados. El último informe indicaba 1.200 muertos. Mientras, el teniente coronel Richard Hecht, admitió no saber cuál será la estrategia última de la guerra. “Estamos centrados en destruir la capacidad militar de Hamás en Gaza. El juego final... eso no lo sé. Lo deciden los políticos, y es una patata caliente, aún no se ha decidido nada. Habrá que esperar”, concluyó.

En Francia, el ministro del Interior, Gérald Darmanin, ordenó la prohibición de manifestaciones en apoyo al pueblo palestino en todo el territorio francés alegando que representan una amenaza al orden público.

Esta decisión se produce después de que el tribunal administrarivo de París haya decidido mantener la prohibición emitida por la prefectura de la capital de una manifestación propalestina que se iba a celebrar ayer en la Plaza de la República.

Desde Londres, el Gobierno británico anunció que enviará buques y aviones militares al Mediterráneo para respaldar a Israel. Patrullas marítimas y aviones de vigilancia comenzarán a operar en la región, detalló en un comunicado Downing Street.