Cientos de miles de libaneses huyen de las bombas de Israel

Enterrada bajo las bombas y el olvido, Gaza ha perdido el foco de la atención mundial, que ahora se centra en Líbano. Las escenas de meses pasados en la Franja se repiten ahora en el sur de Líbano. Cientos de personas se desplazan huyendo de los ataques israelís.

Joe Biden dijo ayer a la cadena estadounidense de televisión ABC que “una guerra total es posible”, mientras el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, volvía a elevar el tono y advertía de que las Fuerzas Armadas del país seguirán atacando “con fuerza” las posiciones del partido-milicia chií libanés Hezbolá “hasta que se garantice el regreso seguro de los civiles evacuados del norte del territorio israelí por los ataques de la milicia libanesa”.

La diplomacia internacional, reunida estos días en Nueva York por la cumbre de la ONU, continúa explorando soluciones. Bide dijo también a la ABC que cree que existe la oportunidad de “llegar a un acuerdo que pueda cambiar fundamentalmente toda la región”. Muy criticado por no haber sabido gestionar la escalada en Oriente Próximo, el todavía presidente de EEUU sugirió que conseguir que Israel y Hezbolá acepten un alto el fuego podría ayudar a lograr un cese de las hostilidades entre Israel y los militantes de Hamás en Gaza.

Otros 90.000

Más de 90.000 personas han tenido que abandonar sus hogares por la sucesión de ataques emprendida en los últimos días por Israel sobre distintos puntos de Líbano, según un balance provisional de la ONU, pese a que las autoridades libanesas aseguran que serán unos 400.000 los nuevos desplazados.

El anterior informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), publicado el 19 de septiembre, cifraba en 111.000 las personas desplazadas en Líbano por la escalada de la violencia desatada hace casi un año, cuando las fuerzas israelíes y el grupo chií Hezbolá comenzaron a cruzarse ataques en la frontera.

Desde el 23 de septiembre, se han registrado otros 90.530 desplazamientos, en algunos de los casos personas que ya habían tenido que moverse previamente por el temor a ser víctimas de algún ataque. Según la ONU, casi 40.000 han acudido a más de 283 refugios habilitados.

Hacia Siria

El Gobierno de Líbano, por su parte, habla ya de cifras considerablemente superiores. Antes de los últimos combates, “teníamos 110.000 desplazados y ahora esta cifra se está acercando al medio millón”, ha dicho el ministro de Exteriores libanés, Abdalá bu Habib, en un acto organizado por el “think tank” Carnegie Endowment for International Peace. El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) afirmó ayer que miles de familias están huyendo desde Líbano hacia Siria a causa de la intensificación de los bombardeos y añadió que cientos de vehículos se encuentran atascados en la frontera, mientras que otros llegan a pie trasladando consigo parte de sus pertenencias. Siria era hasta 2023 el principal foco de inestabilidad en el área.