El PP se abre a negociar una moción de censura del PSOE contra Jácome

La actualidad política en el Concello de Ourense sigue al rojo vivo y el PP tiene la pelota en su tejado. En la mañana de ayer el portavoz municipal del PSOE, Rafael Rodríguez Villarino, anunció que su partido volverá a explorar la vía de la moción de censura para echar al actual alcalde, Gonzalo Pérez Jácome. Esta moción no prosperará si no cuenta con el apoyo del partido que hace solo 48 horas aún formaba parte del gobierno de la ciudad, el PP. Aunque en un primer momento, una de las ediles populares, Ana Morenza, indicó que esa posibilidad “no estaba en la hoja de ruta del partido”, tres horas después desde el PP manifestaban lo contrario. Esto es, que la formación ahora liderada por Manuel Cabezas no se cierra a nada y que está dispuesta a “escuchar, dialogar y, llegado el caso, sentarse en la mesa negociadora y valorar la mejor opción para la ciudad”. Ya se habían manifestado a favor de la moción de censura tanto Pepe Araújo, de Ciudadanos, como los tres díscolos de DO (aunque estos no cuentan en la votación para llevar el asunto a Pleno por haber pertenecido al partido de Jácome).

El único partido de la oposición que se desmarcó ayer de esta iniciativa fue el BNG. El portavoz nacionalista, Luis Seara, calificó esta propuesta como “unha perda de tempo que o único que fai é despistar á xente” y aseguró que la moción de censura la hará “a cidadanía en maio de 2023”.

Villarino explicó que el PSOE abrirá “un diálogo sincero con todos os grupos políticos”, sin condiciones previas. Reconoció que todavía no habían comenzado los contactos -que realizará personalmente- y eludió, en varias ocasiones, mencionar a un candidato que encabece dicha moción de censura. Recordó también que fue el PSOE el que en 2020 exploró esta posibilidad, pero que los demás grupos no la apoyaron. “Esta situación ten que ter punto e final. Non é admisible que a terceira cidade de Galicia estea gobernada por catro colegas”, apuntó.

La posibilidad de una moción de censura con el objetivo de desalojar a Jácome de la Alcaldía está ahora sobre la mesa, pero necesita forzosamente el apoyo del Partido Popular y mucho más si se confirma el desmarque de los ediles del Bloque Nacionalista Galego (BNG). Y es que se necesitan al menos 14 ediles para sacar adelante la propuesta. Con el “no” nacionalista (dos ediles), harían falta, al menos, los “síes” de los nueve ediles del PSOE, el de Ciudadanos (1) y, al menos, cuatro votos favorables de los siete concejales que tiene el PP (o tres si también la apoya el exmiembro de Ciudadanos, Laureano Bermejo). Por consiguiente, el diálogo que entablen PSOE y PP (confirmaron que puede producirse) será clave para que den las matemáticas.

Por su parte, el alcalde, Gonzálo Pérez Jácome, está convencido del fracaso de esta iniciativa y de que gobernará la ciudad con otros tres ediles hasta las elecciones, dentro de diez meses. El regidor no ve al PP “tan inepto e incompetente” como a sus excompañeros de DO. “No creo que hagan alcalde al PSOE, su mayor enemigo, porque hacer alcalde a Villarino podría darle alas de cara a la alcaldía y la Diputación en 2023”, manifestó. Con todo, reconoció que había aceptado la vuelta del PP en 2021 porque “era muy importante evitar cualquier tipo de moción de censura”.

Jácome todavía no ha llevado a cabo la reestructuración del gobierno municipal tras la salida de los siete ediles populares. El propio alcalde asumió todas las competencias de forma provisional: él solo tendrá que encargarse de gestionar Alcaldía, Contratación, Obras Públicas, Recurso Humanos, Artes e Festexos, Medio Ambiente, Urbanismo, Deportes, Turismo, Termalismo, Participación Cidadá,, Xuventude, Política Social, Economía y Facenda. Sobre el funcionamiento del Concello, Jácome repitió lo que dijo en el pleno de la última modificación de crédito: “El mandato, a nivel plenario, está terminado. El pleno es irrelevante”.