La ley del clima incluirá la competencia en meteorología

La conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, dijo ayer que la Xunta “no va a dar ni un paso atrás en la reclamación de competencias” ante el Gobierno central y ratificó que la Lei do Clima de Galicia que ya prepara el Ejecutivo autonómico incluirá las competencias en la materia que se reclaman para “evitar duplicidades”, con el objetivo de “no perder tiempo” en la gestión directa de la meteorología.

Así lo dijo durante la presentación del balance climático correspondiente a 2024, un acto en el que avanzó que la ley del clima en la que ya trabaja la Xunta estará lista, previsiblemente, “en el segundo semestre de este año” y entre su reglamentación incluirá ya las competencias que el Gobierno gallego está reclamando al estatal en materia de meteorología y clima.

La intención, dijo Vázquez, es “no perder tiempo” y avanzar en mecanismos que permitan hacer frente de manera más específica a los retos climáticos gallegos, evitando también “duplicidad de esfuerzos” entre el Ejecutivo central y el gallego.

Paralelamente, Presidencia está trabajando en la solicitud formal de estas competencias meteorológicas, que deben “seguir el cauce normal”. “Mientras, iremos avanzando legislativamente en la Lei do Clima para no perder tiempo”, dijo la conselleira.

Críticas a Pedro Blanco

La conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, criticó que el delegado del Gobierno, Pedro Blanco, “se adelantó diciendo que no va a ser posible” este traspaso, algo que, recordó, “también pasó con la ley del litoral”. “Tendrán que decir los motivos de esa negativa, que no los conozco”, apuntó la responsable de Medio Ambiente que, no obstante, afirmó que seguirán “reivindicando las competencias en materia climatológica”. “No vamos a dar un paso atrás”, añadió.

Sobre la reclamación de estas competencias, Vázquez señaló que la evolución climática hace necesario unificar esfuerzos y evitar que, por ejemplo, los servicios de emergencias tengan “dualidad de alertas”. “Podemos hacerlo mejor”, concluyó su intervención durante el balance climático de 2024.

En otro orden de cosas, la conselleira de Medio Ambiente urgió al Gobierno central que se firme de manera efectiva el traspaso de competencias del litoral y que se “faciliten los expedientes” anteriores. Sin eso, apuntó, no se pueden gestionar cuestiones como la instalación de chiringuitos en las playas, en área de dominio marítimo terrestre. Ángeles Vázquez pidió celeridad para que ese traspaso se lleve a cabo cuanto antes.

El Gobierno central, aclaró, pidió “tiempo para cerrar el año”, pero la conselleira recordó que “ya está avanzado el mes de enero” y la firma aún no está. “Bien que lo agilizaron en el País Vasco”, criticó, alentando al Ejecutivo de Pedro Sánchez a que “si no están por la labor, no nos engañen”. La conselleira de Medio Ambiente insistió en que debe hacerse con celeridad y cumplir lo prometido y lo pactado.

El 2024 fue el tercer año más cálido de toda la serie histórica 

El año 2024 fue “extremadamente cálido” y “muy húmedo”, según el informe de Meteogalicia, que refleja que, en cuanto a temperatura media, fue el tercer año más cálido de toda la serie histórica, al tiempo que combinó etapas muy secas con lluvias intensas, con lo que el balance final es un 14% más de precipitaciones que lo esperado. Así lo desgranó la conselleira de Medio Ambiente ayer durante la presentación del balance climático del año pasado, en el que, dijo el meteorólogo Juan Taboada, se evidenció que “cada vez se hace más desordenada la sucesión de estaciones” y se agudizan los fenómenos extremos a causa del cambio climático.

Según recoge este balance, la temperatura media del año pasado en Galicia fue de 14,7 grados, 1,1 grados por encima de lo esperado, lo que lo convierte en el tercero más cálido de toda la serie histórica, esto es, en más de 60 años. Además, se da la circunstancia de que los dos únicos años que superaron esta temperatura media son los inmediatamente anteriores, 2022 y 2023. El alza el pasado año se dio especialmente en las temperaturas mínimas, que fueron 1,4 grados más elevadas de las habituales en Galicia, mientras que las máximas estuvieron 0,8 grados de media por encima.

En cuanto a las precipitaciones, llovió un 14% más de lo esperado, con lo que la anualidad se considera “muy húmeda”. Fueron 1.469 litros por metro cuadrado de precipitación media, con cinco meses muy húmedos -febrero, marzo, mayo, septiembre y octubre- y dos meses secos -agosto y noviembre-.