Ferraz suspende de militancia a los ediles díscolos, que recurrirán

Los rebeldes comunican al órgano federal que los ediles denunciados e imputados judicialmente son los afines al alcalde

La profunda crisis interna que atraviesa el grupo de gobierno socialista en la ciudad entra en una nueva fase después de que Ferraz decidiese ayer suspender de militancia -de forma cautelar- a los cinco concejales díscolos, Antonio Rodríguez Penín, Susana Bayo, María Devesa, Mónica Vázquez y Alfonso Rodríguez Vilachá, por incumplir sus obligaciones al no acudir a las reuniones de grupo municipal ni a las juntas de gobierno (en el caso de Bayo y Devesa).

redacción. OURENSE

Publicado: 31 ene 2014 - 08:40 Actualizado: 14 feb 2014 - 21:36

La medida será recurrida ante el comité de garantías por los concejales, aunque ya ayer enviaron vía fax a Ferraz un avance de su recurso, en el que, entre otras cuestiones, piden explicaciones de su suspensión sin que se haya celebrado una comisión ejecutiva federal.

La ejecutiva gallega apuró ayer el anuncio de la suspensión cautelar de militancia contra estos ediles, por vía del comunicado y de unas declaraciones del propio secretario xeral, José Ramón Gómez Besteiro, que interpretaba esta medida sancionadora como que 'a executiva federal respalda o proceso levado a cabo pola comisión executiva galega'.

La decisión de suspender la militancia de estos ediles en tanto se tramitan sus expedientes disciplinarios fue un jarro de agua fría para los afectados. Así, María Devesa afirmaba por la mñana que, si era verdad que la habían suspendido (después recibió la notificación), se sentiría 'totalmente decepcionada'. Según reconoció, 'xamais esperei esto. Dende o primeiro momento como militante fun unha persoa leal' y recalcó que 'sempre me importou moi pouco quen fose o cabeza de lista. O meu traballo foi o mesmo'.

A Rodríguez Penín, considerado el líder del grupo de los díscolos, le sorprendió especialmente la 'rapidez' con la que se acordó la suspensión cautelar. 'O martes enviáronlle o expediente dende a executiva galega a Madrid e, de repente, a federal xa tomou unha resolución. Non entendo esto', dijo, al tiempo que aseguró que recurrirán la decisión ante los órganos del partido -tienen 10 días de plazo- y, en función de lo que suceda una vez agotada esta vía, no descartan 'acudir á xudicial', ya que la decisión es 'inxusta, desproporcionada e precipitada'; incluso creen que la medida podría conculcar sus derechos constitucionales, puesto que se les sanciona 'sen oírnos, estamos indefensos'. Así, a partir de ahora, se abre un proceso de instrucción de los expedientes que se puede prolongar semanas. La última palabra la tendrá el comité federal del partido -donde el exsecretario xeral de los socialistas gallegos, Pachi Vázquez, al que se considera ideólogo de la rebelión de los críticos- en base a la propuesta de la ejecutiva federal.

A última hora de la tarde, los críticos comunicaban públicamente vía telefónica su protesta por la sanción que se les ha impuesto, y no sólo por la 'precipitación' con la que se ha adoptado, sino porque consideran que se atenta contra sus derechos constitucionales.

Por ello, e independientemente del recurso que presenten, ya notificaron a Madrid su preocupación por su situación, advirtiendo además que, cuando se les acusa de faltas muy graves, tipificadas en el reglamento de afiliados como 'falta de probidad y honradez en el desempeño de cualquier cargo público y orgánico, no se tiene en cuenta que los ediles 'denunciados e imputados por tales hechos forman parte del grupo del alcalde al que la comisión ejecutiva federal parece no haber incoado expediente alguno'. Toda una declaración de intenciones de los rebeldes.

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