Las áreas de grandes fuegos podrán ser zona catastrófica

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció ayer que el Consejo de Ministros aprobará hoy la declaración de zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil, conocida como zona catastrófica, a los territorios afectados por grandes incendios este verano, como el declarado en Bejís (Castellón), que ha afectado a varios términos municipales, y los declarados este verano en Galicia, sobre todo en la provincia de Ourense.

Sánchez ha visitado la zona afectada por el incendio en el término municipal de Teresa junto al president de la Generalitat, Ximo Puig; el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska y la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé. Previamente, se han reunido en Viver con los alcaldes de los municipios afectados."Me gustaría pedir a los grupos parlamentarios que abandonemos cualquier tipo de lucha partidista y aprobemos lo que es de sentido común; todas las administraciones tenemos que pertrecharnos con mayores recursos y reforzar la cooperación institucional para hacer frente a un enemigo común que son los incendios", ha asegurado Sánchez. Asimismo, el presidente ha señalado que los incendios de "nueva generación" exigen replantear la manera de trabajar en ellos.

Sánchez también ha enfatizado el "golpe psicológico" que supone para los vecinos de la zona un incendio como los de este verano y ha lamentado la pérdida de enseres, bienes patrimoniales y biodiversidad que generan. Por ello, ha incidido en la cooperación entre instituciones, que deben "pertrechar los mayores recursos" en prevención y extinción contra el "enemigo común" que son los incendios.

Entre los incendios más graves de este verano se encuentran nueve concellos ourensanos. Carballeda de Valdeorras, Rubiá, O Barco de Valdeorras (por el incendio que arrasó más de 10.500 hectáreas), Oímbra (por un fuego que se inició en 3 focos), Vilariño de Conso (este foco afectó gravemente al Parque Natural do Invernadeiro), Verín (que fue atacado por un pirómano que cercó la villa con más de 10 focos), O Irixo, Laza y Chandrexa (el último en extinguirse y que afectó a 2.100 hectáreas).

La declaración de una zona como catastrófica puede ir acompañada de ayudas económicas para tratar de paliar los efectos del desastre. Estas ayudas pueden ir destinadas tanto a las administraciones públicas locales como a particulares. Las primeras se proporcionan principalmente para subsanar los daños producidos en la vía pública, y las segundas para las viviendas dañadas o para compensar. Además, quienes se hayan visto afectados por la catástrofe, deben saber que tienen beneficios fiscales para también tratar de amenizar los daños del desastre: exención de la cuota del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), reducción en el Impuesto sobre Actividades Económicas, y Exención de las tasas de Tráfico.

RESPUESTA A GALICIA

La declaración de zona catastrófica por parte del Gobierno es una respuesta a la multitud de peticiones por parte de los concellos gallegos afectados y también por parte de la Xunta. La administración autonómica solicitó al Ejecutivo el pasado 4 de agosto que se declarase “zonas gravemente afectadas por una emergencia de protección civil” Folgoso do Courel, Quiroga, A Pobra do Brollón y O Incio, en la provincia de Lugo; así como O Barco de Valdeorras, Carballeda de Valdeorras, Rubiá, Oímbra y Verín, en Ourense. A estas zonas se suman las afectadas en los fuegos posteriores a esa fecha, esto es, O Irixo, Laza y Chandrexa.

Además, las corporaciones locales de O Barco o de Verín aprobaron, por unanimidad, en sus plenos solicitar al Gobierno central que se les declarase zona catastrófica.