Sánchez se pliega a ERC y cesa a la directora del CNI: le sustituye la gallega Casteleiro

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, decidió destituir a la directora del Centro Nacional de Inteligencia(CNI), Paz Esteban, tras la polémica por el espionaje con Pegasus, un relevo que allana el camino para seguir contando con el apoyo de sus socios y aliados y, especialmente, de ERC. La decisión fue adoptada en la reunión del Consejo de Ministros en el que se presentó el informe del Centro Criptológico Nacional tras haber analizado los móviles de todos los ministros para detectar si había habido algún ataque más por Pegasus que los sufridos por Sánchez y la ministra de Defensa, Margarita Robles.

El resultado de ese estudio pormenorizado certificó que también fue infectado el móvil del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que sufrió dos ataques en junio de 2021 en los que se hicieron con 400 megas y 3,6 gigas respectivamente. También hubo un intento fallido contra el móvil del titular de Agricultura, Luis Planas.

Después de conocer ese informe el Gobierno acordó el relevo de la directora del CNI, quién se habría negado a dimitir en un primer momento, aunque evitó vincular esa salida con los fallos de seguridad detectados o con la presión que están ejerciendo los partidos independentistas para que se asumieran responsabilidades tras desvelarse que hubo espionaje a una veintena de sus dirigentes con autorización judicial.

"Una sustitución"

Robles, que compareció en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo junto a la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, no concretó los motivos pese a la insistencia de los periodistas y llegó a comentar que no era una destitución, sino una “sustitución”. En esa línea, la ha justificado como una decisión para reforzar al CNI. Se trata, dijo, de dar un impulso a este centro en momentos complicados, con la guerra en Ucrania, los ciberataques y nuevas amenazas híbridas, y escoger para ello a “personas preparadas y cualificadas” que aportan un plus de conocimiento.

Para sustituir a Esteban, la ministra propuso y Sánchez aceptó a quien era hasta ahora la “mano derecha” de Robles, la secretaria de Estado de Defensa, Esperanza Casteleiro, quien a su vez será sustituida en ese puesto por la actual subsecretaria del ministerio, Amparo Valcarce. Robles también hizo una cerrada defensa de la labor del CNI y se mostró de acuerdo con la desclasificación de la documentación sobre el espionaje que reclaman formaciones como ERC.

Ella siente que tiene la “plena confianza” del presidente del Gobierno y, frente a las peticiones de los independentistas, aseguró que no piensa dimitir.

Pedro Sánchez comparecerá en el Pleno del Congreso la semana del 25 de mayo para informar de la crisis política motivada por el espionaje con el sistema Pegasus. Será un debate monográfico, según señaló el portavoz del Grupo Socialista, Héctor Gómez, que insistió en que habrá al menos otros dos plenos con Sánchez antes del verano.

Casteleiro, una "espía" conocedora del centro, mano derecha de Robles

La secretaria de Estado de Defensa, Esperanza Casteleiro, se convertirá en la segunda persona de carrera en los servicios secretos que dirige el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), cuestionado por la polémica del espionaje a políticos independentistas y a miembros del Gobierno, entre ellos, al propio presidente Pedro Sánchez.

Casteleiro (Madrid, 1956), mano derecha de la ministra de Defensa, Margarita Robles, tiene por delante una ardua misión: lavar la cara del CNI después de que las escuchas a los móviles de Sánchez y de varios ministros haya producido una brecha en la seguridad nacional. Su nombre ya sonó para dirigir el “centro” hace dos años, cuando finalmente Robles apostó por otra mujer, Paz Esteban. En ese momento era jefa de Gabinete de la titular de Defensa.

Licenciada en Filología y Ciencias de la Educación por la Universidad Complutense de Madrid, desarrolló gran parte de su carrera profesional en el CNI, centro del que fue secretaria general del entre 2004 y 2008, por lo que conoce a la perfección el funcionamiento de “la casa” y a todos sus integrantes. Número dos de Defensa desde junio de 2020, se considera una experta en contraterrorismo y estuvo destinada en Cuba y Portugal.

Aunque nació en Madrid, en 1956, es hija del mugardés coronel del Ejército del Aire, Antonio Casteleiro Naveiras. En el Seijo se encuentra la casa familiar a la que suele acudir durante la época veraniega.