Sánchez apunta a los operadores privados sin descartar un ciberataque

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado que el Ejecutivo llegará hasta el fondo en la investigación sobre el apagón eléctrico que dejó sin suministro a buena parte de la Península este lunes. Aunque Red Eléctrica ya descartó un ciberataque, el Gobierno no excluye ninguna hipótesis y ha creado una comisión de investigación que estará dirigida por la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Sara Aagesen, bajo el paraguas del Consejo de Seguridad Nacional.

Desde La Moncloa, Sánchez ha manifestado que se buscarán todas las responsabilidades necesarias, en especial entre los operadores privados del sistema eléctrico. Según ha explicado, se analizarán en profundidad los cinco segundos críticos en los que se produjo la caída masiva de energía y se tomarán medidas para evitar que un fallo así se repita. "No vamos a descartar ninguna causa hasta tenerla 100% clara", ha dicho el presidente, reiterando que aunque no pone en duda el informe inicial de Red Eléctrica, el Gobierno realizará un análisis independiente para verificar los hechos tanto en la red de transporte como en las fuentes de generación.

El Ejecutivo también ha solicitado un informe al Grupo Europeo de Coordinación de Electricidad, dependiente de la Comisión Europea, y a los reguladores comunitarios, para disponer de una visión externa y técnica sobre el origen del suceso.

Sánchez ha insistido en que no existen pruebas que vinculen el apagón a un ataque terrorista ni a un fallo por exceso de renovables, desmintiendo así los rumores que circulan. Además, ha negado que se produjera una sobrecarga de demanda: en el momento del incidente, el consumo era de unos 25.180 megavatios, una cifra "relativamente baja".

El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) y el Centro Criptológico Nacional están revisando los sistemas de Red Eléctrica y de otras compañías del sector para asegurar la fiabilidad del sistema y detectar cualquier posible brecha.

Aunque ha recibido críticas por la tardanza en su comparecencia, Sánchez ha defendido que era esencial contar con la información necesaria antes de hablar. "Lo importante es obtener un diagnóstico certero", ha señalado, reconociendo la ansiedad ciudadana, pero pidiendo paciencia para evitar errores.

Finalmente, ha garantizado que la ciudadanía y las instituciones serán informadas con transparencia y en tiempo real sobre los avances de la investigación.