Sánchez exigirá eliminar 53.000 viviendas turísticas para destinarlas a alquiler estable

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este domingo en un mitin en Málaga que el Ejecutivo revocará 53.000 viviendas registradas como alquileres turísticos para destinarlas a alquileres permanentes dirigidos a jóvenes y familias. La medida se llevará a cabo este lunes y tiene como objetivo aumentar la oferta de vivienda asequible y frenar la subida de los precios del alquiler.

Según explicó Sánchez, esta decisión se ha tomado tras detectar “miles de irregularidades” en el Registro Único de Arrendamientos, creado para regular y poner orden en el sector de los apartamentos turísticos. “Estas 53.000 viviendas pretenden convertirse en alquileres vacacionales, pero vamos a impedirlo para que estén disponibles de forma estable para la gente joven y las familias de este país”, subrayó.

El líder socialista defendió que “eso es gobernar para la gente”, frente a lo que definió como “la perspectiva neoliberal que ha imperado en la política de vivienda durante los últimos cuarenta años”. Recordó, además, que su Gobierno ha aprobado la primera ley de vivienda en la historia de la democracia española, que otorga nuevas herramientas a propietarios y comunidades autónomas para reducir los precios, construir vivienda pública y protegida, y facilitar el acceso a los jóvenes.

Una nueva política para frenar la especulación

Sánchez argumentó que la proliferación de pisos turísticos “encarece el precio del alquiler y reduce la oferta”, lo que dificulta el acceso a la vivienda tanto a jóvenes como a familias. Por ello, defendió la necesidad de actuar de forma decidida y regular el mercado.

“Queremos que estas viviendas se conviertan en hogares estables, no en un negocio especulativo que expulsa a los vecinos de sus barrios”, señaló. También destacó que la política de vivienda de su Ejecutivo busca equilibrar el mercado, mejorar la protección de los inquilinos y fomentar la construcción de viviendas públicas.

Críticas al PP y Vox

Durante su discurso, el presidente del Gobierno cargó contra el Partido Popular y Vox, acusándolos de “insultar, mimetizarse con la ultraderecha y votar siempre en contra del interés general”.

“Feijóo se ha convertido en una mala copia de Abascal. Solo practican la mala política y la mala educación, sin propuestas, centrados en destruir lo que hemos construido con esfuerzo en los últimos siete años”, afirmó Sánchez, quien aseguró que “los españoles han dado permiso al PSOE para gobernar con su voto, no con las amenazas de la derecha y la ultraderecha”.

El líder socialista recordó que PP y Vox votaron en contra de medidas como la reforma laboral, el impuesto a la banca, el impuesto a las grandes fortunas o la reducción de la jornada laboral. “Su estrategia sigue siendo la misma que la de Montoro cuando dijo aquello de que se hunda España, que ya vendremos nosotros para levantarla”, criticó.