La oposición constata “hechos trágicos” en el asalto a Melilla

Algunos de los diputados que visionaron ayer las imágenes de la tragedia del pasado 24 de junio en la valla de Melilla no llegaron a constatar si se produjeron víctimas mortales en territorio español durante la avalancha de inmigrantes que acabó con al menos 23 subsaharianos fallecidos, mientras otros señalaron que dichas imágenes contradicen la versión del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, sobre que no hubo “hechos trágicos” del lado español, por lo que ninguno, ni siquiera el PP o Ciudadanos, descartan pedir una investigación parlamentaria en la Cámara Baja sobre estos hechos.

Sí pudieron comprobar que la avalancha llegó a alcanzar la parte española, que miembros de las fuerzas de seguridad marroquíes también actuaron en territorio español y que no hubo una atención sanitaria adecuada a los inmigrantes que resultaron heridos. Así lo indicaron algunos portavoces de los grupos parlamentarios tras visionar a puerta cerrada en el Congreso las imágenes de ese día, facilitadas por el Ministerio del Interior y recogidas en ocho horas de grabaciones desde las 7 a las 11 de la mañana de ese día.

Sin embargo, los diputados solo han visto un tercio de ellas, por lo que la sesión no se ha prolongado tanto como estaba previsto. Y es que los parlamentarios rechazaron seguir viendo las grabaciones de las cámaras fijas del perímetro, que no aportaban nada de los hechos ocurridos, y se centraron en las aéreas del helicóptero y el dron de la Guardia Civil. Fue el máximo responsable de la comandancia de la Guardia Civil de Melilla, el teniente coronel Arturo Ortega, quien guió el visionado y quien reconoció que se rechazó en frontera a 470 inmigrantes. Se hizo, según reprocharon algunos portavoces, incluido el de Unidas Podemos, sin que se les identificara uno a uno. “Ni tan siquiera se les preguntó su nombre”, censuraron, como también recriminaron la actuación aislada de algún agente que devolvió a los inmigrantes las piedras que estos les arrojaban.

Aunque todos vieron las mismas imágenes, la interpretación fue muy dispar. Por ejemplo, mientras unos solo vieron piedras y palos entre las “armas” de los inmigrantes, otros llegaron a ver hachas y radiales. Otro ejemplo: mientras unos diputados comprobaron que se atendía sanitariamente a los subsaharianos, incluso por parte de los agentes de la Guardia Civil, otros aseguraron que no se les asistió pese que había una ambulancia a muy corta distancia.

Tras el visionado, algunos diputados mantuvieron sus dudas, ya expresadas en su visita a la valla, y esperan la comparecencia de Grande-Marlaska, el miércoles en el Congreso para poder aclararlas. Porque tampoco se recoge lo que pudo ocurrir después en el lado marroquí. Y hasta esa comparecencia, algunos grupos, como el PP, mantienen la puerta abierta a solicitar una comisión de investigación en el Congreso sobre lo sucedido. El PP, según su diputada Ana Belén Vázquez, aún tiene más motivos para pedir la dimisión de Marlaska, porque las imágenes han constatado que “mintió” y que “dejó desprotegidos a los guardias civiles a su suerte”.