Carlos Mazón dimite sin convocar elecciones: "Ya no puedo más"

Carlos Mazón ha anunciado su dimisión como presidente de la Generalitat Valenciana sin convocar elecciones en una declaración institucional este lunes que llega tras las conversaciones del domingo con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. Reconoció haber cometido errores y pidió perdón a las víctimas de la dana, aunque prácticamente no hubo autocrítica en su discurso, más bien ataques al Gobierno echando balones fuera. "La Generalitat necesita un nuevo tiempo" y que "no haya campaña de odio ni señalamiento contra nadie", señaló, al tiempo que apeló "a la responsabilidad" de la mayoría parlamentaria para elegir nuevo jefe del Consell.

Afirmó que "por voluntad personal habría dimitido hace tiempo porque ha habido momentos insoportables" para él y para su familia aunque ha tenido que pasar un año para que se decidiese a dar el paso. "Ya no puedo más", confesó.

Empezó su comparecencia agradeciendo el apoyo del rey Felipe VI a la Comunitat Valenciana. Hizo un balance de las consecuencias de la dana y destacó los trabajos de recuperación que ha impulsado la Generalitat Valenciana, criticando la falta de apoyo del Gobierno central. "Queríamos ayuda, la pedimos y jamás la recibimos", apuntó. Además, aseguró que el Gobierno les dejó solos por "estrategia política".

"Sé que el ruido que hay alrededor de mi persona es la excusa perfecta para ocultar la asunción de responsabilidades del Gobierno", tanto por "la información errónea" del 29 de octubre, el día de la dana, como en el retraso en la ayuda y la "pésima reconstrucción".

En su intervención, defendió que, ante el "tsunami inimaginable" que destruyó "materialmente y anímicamente" la provincia de Valencia, "desde la Generalitat Valenciana lo hemos hecho absolutamente todo". "Reitero hoy que jamás un gobierno autonómico ha abordado un reto ni remotamente parecido", dijo Mazón.

Tras estos días de aniversario "duros, profundos, desgarradores, crispados y en ocasiones crueles", compartió una reflexión que llevaba haciendo desde la riada. "Es momento de reconocer errores propios", admitió, procediendo a enumerar algunos: permitir que se generaran bulos, no pedir declaración de Emergencia Nacional y, "sobre todo, mantener la agenda de ese día".

"Sé que cometí errores, voy a vivir con ellos toda mi vida, he pedido perdón y hoy lo vuelvo a repetir, pero ninguno de ellos fue por cálculo político o mala fe. No sabíamos que el barranco del Poyo se desbordaba", aseguró.