Bruselas respalda a Lesmes ante las maniobras políticas

La vicepresidenta de la Comisión Europea, Vera Jourová, respaldó al presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, y urgió a renovar ya el órgano de gobierno de los jueces tras casi cuatro años en funciones, una situación que considera “desesperada”. Jourová dirigió una carta al también presidente del Tribunal Supremo en la que apoya el duro discurso que protagonizó la semana pasada en el acto de apertura del año judicial, en el que amenazó con dimitir si el PP y el PSOE no se ponían ya de acuerdo para renovar el CGPJ.

La vicepresidenta de la CE trasladó a Lesmes su “coincidencia” con lo expresado en aquel acto: la “urgencia y prioridad absoluta” de renovar el Consejo y, después de eso, abordar la reforma del modelo de designación de los vocales procedentes del turno judicial “teniendo en cuenta los estándares europeos”, algo que “la Comisión considera necesaria”. “La urgencia y la prioridad absoluta es poner fin inmediatamente a la situación de interinidad del CGPJ procediendo a su renovación, de modo que el Poder Judicial español recupere su plena normalidad institucional y pueda así llevar a cabo adecuadamente las esenciales funciones democráticas que le corresponden”, señala la misiva.

Jourová alude a la “desesperada situación” en la que se encuentra en la actualidad el Poder Judicial español después de casi cuatro años de anomalía institucional y afirma que el correcto funcionamiento de las instituciones del Estado “no debe formar parte del debate político y menos aún ser rehén de ese debate”.

PERJUDICIAL PARA EL ESTADO

La Comisión Europea advierte de que “un bloqueo prolongado que afecte al correcto funcionamiento de instituciones estatales esenciales, como el Poder Judicial, es perjudicial para el Estado de Derecho” y “para el Estado en su conjunto”. Y señala que “todos los actores, cuando desempeñan un papel constitucional, deben hacerlo con un espíritu de lealtad mutua y cooperación sincera, teniendo en cuenta únicamente el interés superior del Estado democrático y de los ciudadanos”.

En su discurso, Lesmes dejó claro que la renovación del CGPJ no puede supeditarse “por ninguna fuerza política a sucesivas condiciones que impiden el cumplimiento del claro mandato constitucional del plazo, que no admite interpretaciones”, y señaló que, una vez se consume esa renovación “y solo entonces” será “ineludible” reformar con urgencia el modelo de elección. Así dio respuesta al debate sobre cuáles son las prioridades -primero renovar y luego modificar la norma, reclamó reformar la ley antes de negociar-.

Tras la advertencia de Lesmes, el PP envió varias cartas a Moncloa, a la Comisión Europea y al propio Lesmes para garantizar su disposición a negociar con “un mínimo de principios y de requisitos”, un gesto que desde el Gobierno se vio como “un intento de aparentar de cara a la galería que quieren renovar”, en palabras del ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. “Si quieren renovar de verdad, me pueden llamar por teléfono y en una tarde renovamos el CGPJ”, añadió Bolaños.

El PP pide independencia y no cambios de nombres

El vicesecretario de Economía del PP, Juan Bravo, aseguró que su formación espera que el presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lemes, no dimita y reiteró su oferta al Gobierno para llegar a un acuerdo en la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), si bien hizo hincapié en que debe ser un acuerdo para dotar de más independencia a ese órgano, no de nombres. Así se pronunció en una rueda de prensa en la sede del PP para presentar la propuesta energética de su partido al ser preguntado cómo valoraría el partido que Lesmes presentara su dimisión, después de que haya amenazado con hacerlo si sigue el bloqueo en la renovación del CGPJ.

Bravo indicó que “lógicamente” el PP no “desea” la dimisión de Lesmes y añadió que es “al revés” porque debería producirse un “agradecimiento al trabajo desarrollado”. Dicho esto, señaló que el responsable de Institucional de su partido, Esteban González Pons, ya hizo llegar al Gobierno una propuesta judicial para “dotar de mayor independencia”, con medidas como “cerrar las puertas giratorias”.

PUNTO DE PARTIDA

“Hemos conocido que el Gobierno no está por la labor”, se ha quejado. Además, señaló que el PP remitió de nuevo hace unos días una carta al Ejecutivo para intentar llegar a un acuerdo pero la respuesta haya sido “escasa, por decirlo de alguna manera”. En este sentido, Bravo insistió en la “firme voluntad” de su partido de llegar a un acuerdo. “La diferencia es que no es un acuerdo en los nombres. Planteamos un CGPJ independiente y creemos que ése es el punto de partida para llegar al resto”, enfatizó la formación popular, algo que defiende la “propia ciudadanía”.