Bellas Artes dibuja el ‘sonido’ del sol en una pasarela de Teleco

n n n Desde la Escuela de Telecomunicaciones de la Universidad de Vigo están acostumbrados a colaborar con otros centros y facultades y no solo en investigación. Un ejemplo de esta colaboración es la Facultad de Bellas Artes, con resultados más que satisfactorios para Teleco. Prueba de ello es la transformación que se hizo en el vestíbulo principal de la Escuela, que pasó de tener un aspecto frío y poco habitable a convertirse en la gran sala de estar de la Escuela. Esto es así gracias a un concurso que se había convocado para llevar a cabo una intervención artística en este espacio y que había ganado la estudiante de Bellas Artes Laura Antelo, que se impuso entre las 60 propuestas presentadas.

Ahora se acaba de resolver la segunda edición del concurso, que impulsaron la Escuela de Ingeniería de Telecomunicación y el Doctorado en Creación e Investigación en Arte Contemporáneo para transformar la pasarela que conecta este centro y su ampliación. La intervención se realizará durante este cuatrimestre.

El ganador fue el alumno de doctorado de la Facultad de Bellas Artes Ignacio Pérez, con una propuesta titulada “O son do Sol”.

La propuesta parte del procesado que el investigador de la Universidad de Stanford Alexandre G. Kosovichev realizó de las mediciones de las oscilaciones y variaciones solares tomadas por la sonda espacial Soho para convertirlas en pistas de audio perceptibles por el oído humano. “Me pareció interesante como desde la ciencia pueden hacerse este tipo de interpretaciones y generar sonidos a partir de imágenes”, señala el autor, que propone plasmar la imagen gráfica generada de una de estas pistas por un software de edición de sonido, sin alteraciones, a lo largo de la pasarela. La imagen obtenida de una de las tres pistas generadas en el proyecto Michelson Doppler Imager a partir de la interpretación de las imágenes tomadas por la sonda de la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA) durante 40 días se presentará “directamente, sin filtros, ni manipulaciones”, apunta. El objetivo, señala, es “guardar la huella o señal característica de ese sonido, con sus oscilaciones, pausas o ritmos”, convirtiéndola así en una “obra plástica, visual y tangible”. La gráfica se reproducirá, a través de una serie de vinilos, en un trazado paralelo a ambos lados de la pasarela en color blanco. Quienes atraviesen este espacio podrán ir observando a su paso “las oscilaciones y formas únicas generadas por la energía solar”, algo, “de lo que que jamás podríamos ser testigos si no fuera por la ayuda de instrumentos y análisis científicas”.n