Ritz-Carlton controlará Barreras tras un pacto con Pemex y Albacora

Ritz-Carlton se hará con el control de Barreras tras un pacto con Pemex y Albacora. Las partes llegaron ayer a un principio de acuerdo por el que la armadora norteamericana se hará con el 75% de los derechos de voto del astillero vigués, tras lograr un compromiso con la petrolera mexicana (principal accionista con un 51%) y con la armadora vasca Albacora (tiene una participación de un 24,5%).

Las empresas auxiliares asociadas en la sociedad Uninaval mantuvieron conversaciones con Ritz para incorporarse capitalizando una pequeña parte del crédito, una opción que sigue sobre la mesa. Acerca del otro accionista minoritario, José García Costas con un 24,5% de las acciones, no han trascendido novedades salvo que puso sobre la mesa días atrás una propuesta para hacerse con el astillero que no fraguó.

Los hechos desencadenados ayer marcan un principio de acuerdo, no se habla de venta sino de cesión de los derechos de voto, por los que Ritz pasaría a tomar el control, lo que permitirá con seguridad que se pueda retomar la construcción del crucero que tiene paralizado. El resto de contratos -con Havila y Armas- siguen en el aire. Los pedidos de Barreras son históricos y tienen un valor de unos 1.000 millones de euros.

Pemex ya había dado un giro total de timón en los últimos días al abrirse a no entorpecer el proceso de negociación en la búsqueda de una solución.

Las partes involucradas negociaban bajo la presión de la fecha del 26 de noviembre -el próximo martes- ya que, según la Ley de Sociedades de Capital, el astillero entraría en causa de disolución debido a su delicada situación financiera (fondos inferiores a la mitad de su capital social).

Ayer mismo, las empresas acreedoras mantenían un encuentro y tenían previsto tratar con Douglas Prothero, el CEO De Ritz-Carlton, pieza clave en todo el entramado. La naviera norteamericana siempre fue el principal interesado en estar al frente del astillero, dado su interés por acabar los dos cruceros que tiene firmados, uno de ellos en avanzado estado de construcción. Podría hacerlo de la mano de las auxiliares, que se constituyeron en sociedad (Uninaval) y entrarían capitalizando la deuda.

José García Costas también puso sobre la mesa una propuesta para hacerse con el control, si bien no cuajó al no encontrar apoyo por prácticamente ninguna parte, especialmente de Ritz, que se sentiría defraudado con el millonario contrato firmado con el astillero para los dos cruceros 'premium'.

El secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, fue el primero en reaccionar a la noticia señalando su "satisfacción por el avance" que "evitaría el escenario de liquidación" aunque precisó que "es preciso seguir trabajando con corresponsabilidad". Lo calificó de "buena noticia".

Por su parte, el presidente del comité de empresa lamentaba ayer "la lucha de poder" que se estaba viviendo en la empresa tras un encuentro con la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón. La nacionalista exigió a la Xunta "que deje de ponerse de perfil" y si es necesario "que se haga con el control accionarial", indicó.