Presión 'in extremis' por la flota gallega en Mauritania

El secretario general de Pesca, Carlos Domínguez, comprometió 'trabajo de persuasión' con todos los grupos parlamentarios y recordó que el sector 'cuenta con la colaboración de todos los eurodiputados españoles para que ellos también persuadan a sus colegas de que este acuerdo no es el acuerdo que queremos y no es el que Galicia necesita', explicó ayer tras un encuentro con la conselleira do Mar, Rosa Quintana, y la alcaldesa de Marín, María Ramallo.

Domínguez indicó que el Gobierno espera que se convoque una comisión mixta, formada por la Unión Europea y Mauritania, para tratar este asunto y 'convencerles' de que es necesario mejorar el acuerdo pues 'está demostrado que su situación biológica es buena y no hay sobreexplotación', apuntó en declaraciones a los medios.

El alto cargo del ministerio dijo también que las negociaciones pasan ahora a 'otra fase del juego', en la que se alejan del ámbito 'especialista' -se trató de definir el estado del stock de pulpo en el caladero mauritano- y entran en el terreno de las 'sensibilidades y los nacionalismos'.

Por otro lado, el secretario general negó la supuesta 'escasa implicación' por parte del Gobierno al respecto de las reuniones mantenidas en los últimos meses entre la conselleira y sindicatos, que pidieron crear un grupo de presión en Europa ante la actitud del ministerio. La prueba, según destacó Carlos Domínguez, es que en la comisión de pesca de Parlamento Europeo se consiguió aprobar un informe negativo sobre el acuerdo con Mauritania 'gracias al trabajo conjunto de la comunidad autónoma y la persuasión de los eurodiputados y de lo que modestamente hizo la Secretaría General', dijo.

Por su parte, la conselleira do Mar, Rosa Quintana, resaltó que 'simplemente hay que perfilar las nuevas líneas de trabajo para conseguir el mismo resultado de la comisión de pesca en el pleno del Parlamento' y permitir a la flota gallega volver al caladero mauritano, indicó.