Más informes avalan la rebaja del IVA a productos pesqueros

La cadena mar-industria tiene que ir más allá de los 50.000 profesionales de las distintas etapas que aglutina, desde la captura, cultivo y recolección de la materia prima a su transformación y posterior distribución. El conselleiro del Mar, Alfonso Villares, pretende que en ella se sientan integrados los consumidores finales, el conjunto de los 2,7 millones de gallegos. El conselleiro visitó ayer varios puntos de venta de pescados y mariscos de la Plaza de Abastos de Viveiro y otros puntos del mismo municipio, como las pescaderías Seiramar y Grallal. Acompañado por la jefa territorial de la Consellería, Mariña Gueimunde, destacó y agradeció el importante papel que juegan estos establecimientos y sus profesionales en la promoción de los alimentos marinos, contribuyendo la que lleguen a la mesa de los consumidores finales.

Alfonso Villares subrayó la importancia de trabajar juntos para que los pescados, mariscos, conservas y otros transformados del mar gallegos lleguen cada vez a más bocas, pues, por un lado, se refuerza a un sector económico que genera cerca del 5% del PIB de Galicia, siendo el cuarto más relevante. Una actividad de la que viven millares de familias y que se sustenta sobre la confianza en la calidad de estos alimentos, sobre la variedad y el sabor inigualable que ofrecen pescaderías y mercados. Todo este trabajo de promoción debe venir acompañado, reiteró el conselleiro, “de un entorno de mercado acomodado y en equilibrio, algo que no se produce en la actualidad por el hecho de que el Gobierno del Estado facultó rebajas del IVA a cierto tipo de alimentos mientras insiste en negarle el mismo trato a los productos del mar”. Por eso, señaló el responsable autonómico que continuará acompañando al sector primario -pues también los ganaderos reclaman igualdad de trato fiscal para la carne-, en su justa demanda de que se baje también el impuesto que graba su consumo, pues además de una cuestión económica tiene la importante componente social de la salud, pues estos alimentos redundan en la mejora de la salud y de la calidad del conjunto de la sociedad.

Alfonso Villares ve más justificada que nunca la lucha del conjunto de la cadena mar-industria de Galicia y de la propia Xunta por conseguir esta rebaja del IVA. Además de la prueba empírica de lo bien que funcionó en países vecinos como Portugal o Francia, donde esta medida contribuyó a elevar el consumo de pescados, mariscos y conservas, está avalada por informes de la Comisión Nacional de Competencia, del Observatorio Europeo de los Productos de la Pesca y de la Acuicultura y más recientemente por estudios independientes realizados por las universidades gallegas. Economistas de la USC y de la Universidade da Coruña certificaron con los suyos análisis que un descenso del tipo del IVA a los productos del mar del 10 al 5% que se trasladara al consumidor final se traduciría en un incremento total del valor añadido tan solo en la comunidad de 28,5 millones de euros y permitiría la creación de hasta 5.575 empleos.