Javier Touza: "Va a perjudicar mucho a la pesca de litoral"

Touza destacó como datos positivos la subida hasta un 10 por ciento del gallo (rapante) y que el rape se mantiene. Pero advirtió sobre el daño que va a suponer el recorte de la merluza, un 19 por ciento en aguas europeas y el 20 en las ibéricas, "que afectará y mucho a la pesca de cerco". Lo mismo señaló del jurel, que puede reducirse hasta en un 40 por ciento en el mar Cantábrico y Galicia y Portugal, lo que afectaría a las pesquerías de litoral. "Eso es lo más grave, supondría un golpe muy fuerte para el cerco sobre todo, no tanto para el Gran Sol", dijo. En todo caso, indicó que "habrá que negociar" y alertó respecto a que Bruselas continúa incluyendo en sus planes para 2020 al Reino Unido, pese al Brexit, cuya aplicación es todavía una incógnita.

"Nadie sabe si vamos a poder seguir pescando dentro de un mes en las aguas británicas", sentenció Touza.

Bruselas valida la 'gestión responsable'

"Este es el resultado de una gestión responsable y unos esfuerzos continuados, principalmente de nuestros pescadores, quienes son los primeros en aplicar nuestras medidas de conservación y también los que más se benefician de unos mayores rendimientos", explicó Vella. Con respecto a las capturas accesorias de especies para las que un buque no tenga cuota y cuya pesca podría desembocar en el cese de la actividad, el Ejecutivo comunitario propone mantener el sistema de intercambio de cuotas.

No obstante, precisa que las cantidades exactas de capturas accesorias y las medidas que acompañarán serán comunicadas después de consultar a los expertos del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES).