Inversores vigueses buscan nuevas startups por el mundo

Encomenda, Lanai, Samaipata, Seaya, Mundi Ventures, Bonsai o The Food Tech Lab tienen mucho en común. Son grandes referentes en el mundo de la inversión en startups y todas son de origen gallego, algunas incluso de Vigo y estuvieron en The Way.

Samaipata es quizá la más conocida, una firma de venture capital fundada por José del Barrio Puerta, de familia empresaria viguesa y fundador de La Nevera Roja. El nombre es el de un municipio de Bolivia del que se enamoró. El fondo Encomenda, se llama así porque es la aldea de los padres de Carlos Blanco, su fundador, en Trives. La Playa de Seaia está en Malpica y de ahí Seaya Ventures, que lidera Beatriz González, hija de Francisco González, expresidente del BBVA, que se inspiró en el pueblo donde veraneaban. Lanai está liderado por el vigués Rubén Ferreiro; Kibo, por el coruñés Aquilino Peña; Mundi Ventures está dirigido por Javier Santiso, hijo de gallegos emigrados a Luxemburgo; a Bonsai Ventures la lidera Javier Cebirán, cuya familia es de Cambados; o The Food Tech Lab, del que forma parte el vigués Juan Cividanes, exdirector del Igape.

Entre esos referentes está el vigués Telmo Pérez, director de Innovación y Nuevos Negocios de Acciona y consejero de Encomenda, que ayer se pasó por la cumbre de las startups en Vigo, The Way. Considera que “el ecosistema gallego, desde el punto de vista de proyectos y de emprendedores, goza de un talento importante”. Pero, a su juicio “adolece de la escala suficiente para ser un ecosistema en sí mismo. Habiendo talento, creo que lo que más falla es la parte de inversión”. Ve que “seguimos muy anclados en el inmobiliario”. Para él es “una alegría enorme ver cómo ha evolucionado en estos 15 años, aunque nos falta mucho”.

En resumen, en Galicia hay talento, hay universidades, hay startups y gente con ideas, pero falta un capital tractor, tanto privado como público. En este sentido Telmo Pérez ve ejemplos en Francia o en EE UU. “La parte francesa, que la conozco bien de mi tiempo en Orange, en gran medida la ha dinamizado el tractor público. Conocí a Emmanuel Macron cuando era candidato y ya apoyando a startups francesas”. En el caso de EE UU “todo el dinero que activa en innovación e inversión a través de los programas de defensa es brutal”.

En cuanto a sectores de inversión preferentes cita la IA, salud, educación, biotecnología e impacto, ya sea social o ambiental: “Van a tener mucho desarrollo en los próximos años”, explica. Luego en ámbito industrial destaca la robótica y la construcción.

El vigués Rubén Ferreiro es emprendedor, inversor y mentor y fundador del Grupo Viko y de Lanai, considera que el ecosistema de startups en Galicia “no se desarrollará de verdad hasta que haya una gran compañía”. Reflexiona sobre esta máxima explicando que “la teoría nos dice que una startup se puede montar desde cualquier sitio. La realidad es que estar cerca de ecosistemas donde hay muchos más ejemplos es mucho más fácil”, porque “para que salga alguna buena tienen que intentarlo muchas. Es un tema de estadística”, añade. En concreto “si has visto un caso de éxito, porque trabajaste en uno, lo entiendes mucho mejor, ves las dinámicas, entiendes la oportunidad y lo intentas. Entonces hasta que haya una gran startup aquí, que se venda por unos pocos cientos de millones y esos empleados también se ganen muy bien la vida y vuelvan a emprender, no se desarrollará de verdad el ecosistema”.

Con la perspectiva que le da la experiencia de 25 años “hemos mejorado y para los inversores también es muy atractivo”. “Cuando empecé era raro. Conseguí capital riesgo de Unirisco, que me habían invertido 60.000 euros y era un dineral”.

Lanai ya ha invertido en cuatro compañías gallegas, han vendido tres y siguen receptivos. “Por ser de aquí, pues encantado de invertir en startups de aquí, pero el dinero que tienes es finito y tienes que escoger las mejores. Pero obviamente tienes tu corazoncito”, asegura. Para los que estén buscando inversor, en Lanai “somos agnósticos de sector, nos da igual lo que hace, tiene que tener tecnología, que le va a dar la escalabilidad para que pueda alcanzar la valoración necesaria que a nosotros nos funcione como inversores y equipos muy buenos”, reflexiona.

El vigués Juan Cividanes lidera con otros socios The Food Tech Lab, un fondo centrado en tecnología del sector primario. Están a punto de cerrar una inversión en Galicia en el sector lácteo, que construirá una planta en la comunidad. “Tenemos un proyecto que ya está en fase de industrialización y ya ha conseguido pedidos. Ahora tiene una necesidad de aumentar la capacidad productiva y tiene que escalar para ser capaz de cumplir las ventas que espera para el año 2027”, explica.

Ideas para los que buscan inversores: “Invertimos en la tecnología que encaje en nuestra tesis: automatización o robotización para el campo, en nutrición y salud, circularidad y todo lo vinculado a la proteína alternativa " y con intención de permanencia.

Mónica Rodríguez es consejera delegada de NetAccede y Jorge González, director de inversiones. Están en una nueva etapa de la firma de capital riesgo. “Ya tenemos cinco participadas y buscamos invertir para apoyar a proyectos nuevos”, explica. Precisa que “somos agnósticos, pero nos atraen mucho los proyectos donde manejan mucho volumen de datos. Creemos que con la IA se va a aportar mucho valor. También estamos muy interesados en la digitalización de sectores”, añaden.

En The Way han tenido estos días reuniones para conocer proyectos: “Como aquí no hay métricas ni datos de facturación, vemos mucho la idea. Hay muchas ideas buenas, pero que no aseguran el éxito. Nos fijamos en el equipo y quién les está apoyando”. Ahora buscan de 10 a 15 inversiones.

Premios para Rubén Ferreiro y Telmo Pérez

En el cierre de The Way Startup Summit David Regades, delegado de Zona Franca, manifestó que “el año que viene auí estaremos”. Lalo García, director, aseguró que cumplirán 15 años y "propondremos algo innovador". El premio de Emprendedor fue para Rubén Ferreiro, de Lanai; Telmo Pérez, de Acciona, se llevó el accésit Corporate Venture. Los premios de startups, Batea Oncology y Marosa.