El Govern fuerza el rescate de Celsa por el Ejecutivo central
Se trata de la mayor operación aprobada a través del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas
El Consejo Gestor del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, que depende de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales, aprobó ayer la ayuda solicitada por Celsa por valor de 550 millones de euros.
La cuantía será canalizada a través de la concesión de un préstamo participativo por importe de 280,5 millones y otro ordinario de 269,5 millones, y dado que el primero es superior a 250 millones de euros, es necesaria la autorización por parte de la Comisión Europea antes de su elevación al Consejo de Ministros.
La operación se aprobó tras el análisis de la situación económica y jurídica de la siderúrgica, del impacto que ha sufrido por la pandemia y de su plan de viabilidad, y de la reestructuración de la deuda con sus acreedores, según un comunicado de la SEPI. Se trata así del que constituye el mayor rescate con el citado Fondo del Gobierno central, y llega tras las reiteradas presiones al propio presidente Pedro Sánchez de la Generalitat de Cataluña.
2.000 millones de deuda
El acuerdo llega un mes y medio después de que la SEPI diera el visto bueno preliminar al expediente de Celsa para su rescate, solicitado a mediados de 2020. La SEPI concluyó el 15 de marzo el análisis de la solicitud con cargo al Fasee solicitada por Celsa, quien aceptó los términos y condiciones fijados por el Fasee para la concesión de la ayuda.
El grupo, que cuenta con una deuda superior a los 2.000 millones en España, cerró 2021 con una facturación de 5.300 millones y un ebitda alrededor de los 600 millones a nivel global, y cuenta con 4.500 trabajadores en España y cerca de 10.000 en toda Europa.
Para Celsa España la crisis ocasionada por la pandemia generó caídas en sus mercados naturales del 25% en 2020, año que arrojó un resultado negativo de 364 millones de euros.
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