La viguesa Ecoforest compite con los grandes de la geotermia y aerotermia
Exporta el 80%, con Holanda y países del Norte de Europa como principales mercados, y factura 55 millones
El parque empresarial de Porto do Molle cuenta con una buena representación de empresas punteras que compiten en los mercados internacionales y una de ellas es Ecoforest, único fabricante en España de bombas de calor de energía aerotérmica y geotérmica.
En Porto do Molle puede fabricar 12.000 bombas de calor al año a un turno y con capacidad para ampliar, porque cuenta con la propiedad del terreno colindante y aprobada la ampliación.
Esta empresa familiar nace en el mundo de las estufas de pellets. En 2012 se crea Ecoforest Geotermia, con un producto en el que la innovación es la clave y que permite modular la potencia, con una bomba de calor que se adapta a la vivienda. La propia sede de Ecoforest en Porto do Molle es ejemplo de ello, con energía geotérmica.
“Nos diferenciamos como empresa tecnológica, con un software que permite adaptarse a las instalaciones. Nosotros damos soluciones específicas, por ejemplo la sede de Ecoforest extrae el agua (fuente de esa geotermia) de un aljibe”, explica Pablo Alonso Cameselle, director de marketing.
En 2018 la compañía desembarca en la aerotermia. La inversión es más baja y los rendimientos altos. “El mercado va hacia la aerotermia porque es más barata y más fácil. En geotermia necesitas espacio o terreno para hacer pozos de captación. En aerotermia es tener un espacio para instalar el equipo exterior de captación de aire”, apunta Pablo Alonso Cameselle, director de marketing.
Además, Ecoforest cuenta con un producto que se adapta muy bien al mercado del norte de Europa y de gama media/alta. “No competimos con los asiáticos. En Europa se exige más diseño y equipos con mejor rendimiento y menos ruido”, precisa. Sus competidores son la japonesa Daikin, Saunier Duval en España o la sueca Nibe.
En su línea de innovación continua, Ecoforest desarrolló en 2021 bombas de calor de aerotermia con refrigerantes naturales, que permite hacer renovación de la instalación doméstica más fácil con los mismos radiadores que se tienen de otro tipo de energías. Así se ha convertido en el único fabricante de España de bomba de calor de aerotermia y geotermia y apetecible para grandes empresas del sector y fondos de inversión.
Desde su nacimiento, la facturación se viene incrementando un 30% anual. En 2022 fue de 55 millones de euros, con 210 empleados y el 80% ingenieros. El 80% de la producción se exporta a Europa con Alemania como uno de sus mercados de referencia.
Cuenta con fábrica de pellets y estufas y calderas en Vincios, en Nigrán fabrica las bombas de calor y en Vilacañas (Toledo), pellets combustible.
Inicios como la primera marca de estufas de pellets de Europa
Ecoforest es una empresa familiar, profesionalizada en su dirección, que preside José Carlos Alonso. Se definen como tecnológica por su alta inversión en I+D y su diferenciación en el producto.
La compañía nació en Vigo en el seno de un conocido establecimiento de fontanería, Vapormatra. De aquel negocio inicial su fundador se introduce en 1992 en la fabricación de estufas y calderas de pellets.
Fue una revolución en España y enseguida empezó la distribución en toda Europa, hasta el punto de que instaló la primera planta de pellets como combustible, para crear el mercado, con fabricación en Vigo. Así, Ecoforest se convirtió en la primera marca de estufas de pellets de Europa.
La invasión de Ucrania por Rusia ha venido a cambiar este mercado, por la lucha por las energías. Pero mucho antes de esta crisis, Ecoforest ya había iniciado su diversificación. En 2010 empezó a trabajar con la Universidad de Vigo en bombas de calor geotérmicas.
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