La historia espera a España

España-Italia es la gran final de la Eurocopa de Polonia y Ucrania. La justa. Dos selecciones que arrancaron midiendo fuerzas el campeonato. La Roja ha sabido competir. Ha realizado una Eurocopa perfecta con la base en su defensa. Un solo gol encajado es el impulso para el triunfo.

En su camino estuvo minutos en el alambre, ante Croacia, por enarbolar la bandera del juego limpio. Un empate dejaba fuera a Italia. Cosas del destino, su rival en la final de Kiev. De nuevo, como en el Mundial 2010, superó eliminatorias ajustadas ante Francia (2-0) y Portugal (0-0), en los penaltis. Añorando la pegada del lesionado David Villa.

El favoritismo, la presión de ser el rival a batir, es un papel nuevo para España. Los rivales han cambiado su identidad. Todos menos Portugal, tan valiente que rozó el premio. El seleccionador del éxito, Vicente del Bosque, lo ha tenido claro desde el principio. No ha dudado. Diez titulares indiscutibles y la figura del nueve rotatoria en función del rival. Antes de la final sólo tiene dos dudas por despejar: mantener a Silva, del que preocupa su bajón físico, y elegir la referencia ofensiva: Cesc –el favorito–, Negredo o Fernando Torres.

El resto del equipo titular lo sabe el país de memoria. El cansancio era un riesgo que había que asumir. Casillas, Arbeloa, Sergio Ramos, Piqué, Jordi Alba, Busquets. Los seis jugadores que han jugado todos los minutos. Más Xabi Alonso, Xavi e Iniesta.

La ambición de una España que busca su tercera Eurocopa chocará con el 'estilo Prandelli', que busca un título para coronar el cambio. Es la nueva Italia. La tetracampeona alejada del conservadurismo y el 'catenaccio' clásico.

Casi nadie esperaba que Italia alcanzara la final. Sobre todo, con los problemáticos comienzos en la preparación de la Eurocopa. A poco más de una semana de viajar a Polonia, el escándalo de las apuestas salpicó a algunos jugadores que estaban en la concentración de Coverciano y el defensa Criscito tuvo que hacer las maletas.

Pero Italia sabe cómo lidiar con asuntos de este calibre. Ha ido pasando rondas hasta plantarse en la final. Lo ha hecho con momentos de buen fútbol y superando las lesiones de algunos jugadores que para enfrentarse a España estarán recuperados. Los primeros, De Rossi y Chiellini, que ante Alemania en semifinales ya demostraron haber superado sus problemas.n