Disturbios tras un partido en Indonesia dejan 125 muertos en Java

La tragedia registrada en Indonesia se considera la segunda mayor en la historia del fútbol

AGENCIAS

Publicado: 02 oct 2022 - 23:40 Actualizado: 03 oct 2022 - 12:05

Una mujer pasea por el escenario de los disturbios, un terreno de juego que quedó arrasado.
Una mujer pasea por el escenario de los disturbios, un terreno de juego que quedó arrasado.

Más de un centenar de personas perdieron sus vidas y varias decenas de otras resultaron heridas durante unos violentos disturbios tras un partido de fútbol en Indonesia, en lo que ya se considera como la segunda mayor tragedia de la historia del fútbol mundial.

Los antidisturbios lanzaron botes de humo en el estadio.
Los antidisturbios lanzaron botes de humo en el estadio.

Los hechos ocurrieron la noche del sábado, cuando miles de aficionados del club Arema irrumpieron en el campo tras la derrota 2-3 ante el Persebaya Surabaya en el estadio Kanjuruhan de la ciudad de Malang, en la provincia de Java Oriental, y provocaron enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, que han dejado hasta el momento 125 fallecidos, según las autoridades del país.

Un aficionado intenta ponerse a cubierto ante varios policías.
Un aficionado intenta ponerse a cubierto ante varios policías.

La rabiosa multitud embistió contra los policías y destrozó diversas infraestructuras del centro deportivo, así como una quincena de vehículos en un brote de violencia que fue calificado ayer como "anárquico" por el jefe de policía de Java Oriental, Nico Afinta.

Los agentes seguridad respondieron con gas lacrimógeno en un intento de frenar los ataques, lo que provocó el pánico entre los aficionados y desembocó en una estampida. "Era un espacio lleno de gente, que provocó dificultad para respirar, falta de oxígeno", señaló Afinta en una rueda de prensa.

Así, la mayoría de las víctimas sucumbieron por asfixia, traumas o pisotones, según indicaron fuentes hospitalarias.

Esos enfrentamientos entre hinchas y policías dejaron además casi dos centenares de heridos, que fueron ingresados en diferentes hospitales de la región con distintos niveles de gravedad, por ello las autoridades no descartan que el número de muertos pueda aumentar en las próximas horas.

Varios supervivientes y testigos de la espiral de violencia denunciaron la brutalidad de la policía, que además de disparar bombas de gas también utilizó porras y proporcionó "golpes y patadas" contra los hinchas, según los relatos recopilados por los medios locales.

Tras la catástrofe, la Liga indonesia fue suspendida temporalmente y un equipo de la Policía Nacional se desplazó al lugar de los sucesos para "investigar extensamente" los hechos, según anunció el presidente de Indonesia, Joko Widodo, en un discurso televisado.

"Lamento esta tragedia y espero que esta sea la última tragedia del fútbol en el país. No dejéis que otra tragedia humana como esta suceda en el futuro. Debemos mantener unido el espíritu deportivo, la humanidad y el sentido de hermandad de la nación indonesia", afirmó el mandatario en su intervención. Entre los puntos claves de la investigación figuran el uso de gas lacrimógeno por la Policía -cuyo uso está prohibido por la FIFA en el interior de estadios debido a su potencial peligro- y la supuesta venta de unas 4.000 entradas más allá del aforo permitido en el recinto deportivo.

Contenido patrocinado

stats