Acoso sexual en la Supercopa de España

Fútbol | Supercopa de España

Mujeres de las familias de los futbolistas del Mallorca denuncian públicamente que fueron acosadas verbal y físicamente a la salida del estadio; la Federación no se pronuncia

Publicado: 11 ene 2025 - 12:19 Actualizado: 11 ene 2025 - 12:19

Los pocos aficionados mallorquinistas en Arabia Saudí.
Los pocos aficionados mallorquinistas en Arabia Saudí.

La polémica disputa de la Supercopa de España en Arabia Saudí vivió el pasado jueves otro deleznable capítulo cuando, durante y tras la disputa de la semifinal que enfrentó al Real Madrid con el Mallorca, los escasos seguidores del conjunto balear, en su mayoría familiares de los jugadores, fueron acosados por aficionados locales presentes en el duelo que apoyaban al conjunto blanco. Más allá de desconsideraciones y burlas varias, tanto en la grada como en el camino posterior hacia el autobús, los actos más graves fueron los tocamientos a las mujeres, que fueron denunciados públicamente por los seguidores sin que la Federación Española de Fútbol, presidida por el pontevedrés Rafael Louzán, haya hecho mención alguna a tales sucesos, conocidos ya desde esa misma noche a través de los medios de comunicación. 

Tampoco el Mallorca se ha pronunciado al respecto, aunque algunas fuentes señalan que están recabando pruebas videográficas para tomar una determinación y que ha comunicado su malestar a la Federación Española. De momento, las dos mujeres que han mostrado el temor vivido son la esposa del gallego Dani Rodríguez, Cristina Palavra, y la novia de Dominik Greif, Natália Kalužová. Esta última fue más contundente, al apuntar en declaraciones a La Sexta situaciones vejatorias. “Mientras intentaban separarnos de nuestro grupo y nos tiraban de los brazos, ocurrió que también nos agarraron del pecho. Durante el partido, cuando quise ir al baño, me sujeté los pantalones mientras bajaba las escaleras para no tropezar. Esto hizo que se me vieran las rodillas y comenzaron a gritarme propuestas sexuales en árabe e inglés mientras me grababan. Fue una situación muy desagradable”, comentó. Y aún añadió al respecto que “me señalaban con el dedo y me preguntaban por cuánto dinero estaría dispuesta a irme con ellos. Simplemente es asqueroso”. Siempre sin seguridad alguna.

La situación se tensó aún más al acabar el encuentro. “Bajando las escaleras del estadio, literalmente tuvimos que correr porque empezaron a empujarnos. Todo esto sucedía mientras esposas y madres sostenían a sus hijos. Nos metían los teléfonos en la cara para grabarnos mientras nos gritaban cosas horribles en árabe”, apuntó Natália. La Supercopa sigue su curso.

Contenido patrocinado

stats