La UD Mos no perdona ante un Villestro aún sin puntos

En este mundo del fútbol, cada vez más igualado y trabado, en el que cada vez es más difícil ganar y en el que cada fin de semana se pierden puntos en los lugares más inesperados, parece complicado tildar un partido de trámite. Sin embargo, cuando un equipo no ha sumado punto alguno después de 20 partidos, la evidencia es más grande que la corrección. Por eso, el triunfo de la UD Mos ayer ante el Villestro era más que obligatorio.

De hecho, la escuadra compostelana certificó en As Baloutas un descenso que ya es matemático, pero que lleva siendo virtual casi toda la temporada. El conjunto amarillo es el que marca la permanencia con 18 puntos, justos los que quedan por disputarse para concluir la competición.

La batalla real para seguir en categoría estatal de las mosenses es con el Victoria FC de Santiago, que ayer empató con el Umia y se queda a seis unidades del equipo que dirige Diego Puentes y Telmo González.

Antes de la media hora de encuentro, el Mos logró disipar la única leve incógnita que podía entrañar el choque. Lu Bouzón, probablemente la mejor futbolista del equipo amarillo esta temporada, destrabó el duelo e inauguró el marcador para alfombrar el camino hacia tres puntos balsámicos, imprescindibles en la lucha por la permanencia.

Con ventaja en el marcador, las jugadoras locales sumaron un punto de tranquilidad y pasaron a dominar a placer. Con claridad. Así durante todo el segundo tiempo. Solo faltaba lograr un segundo gol, que diese completa seguridad ante cualquier susto eventual del Villestro. Difícil, teniendo en cuenta que tiene seis goles a favor.

Así, con la victoria en el bolsillo, las locales se dedicaron a disfrutar en los 20 minutos restantes. Con estos tres puntos, el conjunto de Diego Puentes y Telmo González se queda más cerca de la permanencia.