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El presidente del Celta niega que vaya a realizar una operación acordeón y dice que no capitalizará su deuda postconcursal
Carlos Mouriño aprovechó la tradicional ofrenda floral del Celta al Cristo de la Victoria para referirse por primera vez a los numerosos cambios que se han producido en el accionariado del club en las últimas semanas. Primero fue un grupo de ex jugadores, liderado por Diego Placente, el que decidió capitalizar los 3,5 millones que le debía la entidad y convertirse en el segundo máximo accionista. Luego, fue Caixanova, que acudió a la ampliación con 5,5 millones, la que desplazó a los futbolistas de esta privilegiada posición. Ahora, Mouriño, que también convirtió en acciones unos 2 millones de euros, dice contar con el respaldo de la caja, por lo que controla el 60% del capital social de la entidad: En la ampliación, cada uno hizo lo más oportuno para sus intereses y creo que nosostros como consejo salimos reforzados. Hemos ido a las últimas asambleas con un respaldo del 37 ó 38% y a la próxima acudiremos con la representación de un 58 ó 60% de las acciones. Estamos ahora más respaldados por nuestra seriedad y la magnífica gestión de mi equipo. No obstante, el presidente niega que haya pagado de su bolsillo esos 5,5 millones que ha capitalizado la entidad de crédito para no perder el control del club. Tras la entrada en el accionariado del grupo sindicado de jugadores, desde el club se planteó la posibilidad de realizar una operación acordeón, o lo que es lo mismo, una reducción de capital y una ampliación posterior para que Mouriño siguiese llevando las riendas del club. Pues bien, esa operación se ha descartado por innecesaria. Habrá reducción, la ley obliga a hacerla, pero no ampliación: Puedo garantizar que no voy a meter lo que me debe el club en una posterior ampliación para perjudicar a nadie. Esa deuda que tiene el Celta conmigo seguirá ahí, figurando en los balances, dice Mouriño, que también anuncia que tampoco entrará en la nueva fase de la ampliación ahora en marcha, abierta a todo el que quiera realizar aportaciones dinerarias, aunque no descarta que alguien acuda: Yo no voy a ir con dinero a la ampliación. Puede que nos llevemos alguna sorpresa y alguien lo haga, como pasó con los acreedores, que no esperabamos que fueran tantos, o tal vez no.
Que nadie venga como salvador de este club, y mucho menos Placente y Contreras
Mouriño aprovechó la ocasión para cargar contra el grupo sindicado de jugadores que ha decidido capitalizar su deuda con el club. El presidente ve oscuros intereses en esta operación y dice que estos futbolistas no están legitimados para hacerse con el control del club: Que no se considere nadie salvador del Celta, y mucho menos Placente y Contreras, que fueron culpables de lo que pasó en el vestuario en el descenso del Celta. Además, también dudó de que la verdadera intención de sus representantes sea ayudar a la entidad: Si alguien me dice que viene a apoyar y luego a demandar, no lo entiendo muy bien. Si dicen que capitalizan para recuperar su dinero, será porque están convencidos de que les van a comprar las acciones. ¿Quién?, yo no lo sé. Nosotros estamos dispuestos a recibir a todo el mundo si alguien quiere colaborar con el Celta, pero ésa no creo que sea su intención. Por otra parte, Carlos Mouriño niega que este grupo cuente con la potestad de nombrar un consejero, aunque afirma que si tienen que tener un puesto en el consejo, que no lo creo porque la ley marca que no lo podrán tener en dos años, adelante.
Eusebio, un entrenador de futuro
A pesar de que la intervención de Carlos Mouriño se centró en temas económicos e institucionales, también hubo hueco para lo deportivo. Y es que cuando un equipo comienza una temporada de una forma tan irregular como lo ha hecho el Celta, este mal arranque prima en el interés del aficionado sobre los asuntos económicos. El presidente, como es habitual en él, hizo un llamamiento a la tranquilidad y aprovechó la ocasión para reiterar su confianza en Eusebio, del que dice que es el técnico ideal para este joven Celta: Nunca hubo desconfianza. Cuando nos hicimos cargo del Celta, siempre hablamos de un proyecto que nos gustaría consolidar a largo plazo, que, por distintos motivos, no pudimos hacer hasta ahora. Nos gustaría que ese proyecto de futuro lo liderara un entrenador de las características de Eusebio. Si es él, estaríamos encantados. El máximo accionista de la entidad celeste es optimista respecto al rendimiento del equipo. Cree que pronto va a comenzar a escalar en la clasificación. Ante todo, pide paciencia a la afición. Veo bien al equipo, dentro de las dificultades, que no podemos negarlas. Necesita tiempo y creo que cada vez está soltándose más. Los jugadores jóvenes con los que contamos se están adaptando a la categoría. Opino que no vamos a pasar los mismos apuros que el año pasado, comentó Carlos Mouriño. Por otra parte, defiende la plantilla confeccionada por Miguel Torrecilla este verano, en la que la apuesta por los jugadores de las categorías inferiores es innegable, a pesar del pobre rendimiento mostrado por los futbolistas sobre el terreno de juego: Creemos que lo estamos haciendo bien, en base a la cantera. Tuvimos problemas con la delantera al principio, en la que hubo que alinear a jugadores muy jóvenes, pero conforme pasan los partidos se ve mucho más asentado al equipo.
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