Meira, versión terrenal

De vez en cuando, conviene salir de la monotonía y reencontrarse con lo que sustenta tu pasión. El Rallymix de Ribadumia ha sido ese refresco veraniego para el piloto gondomareño Alberto Meira, que se dio el pequeño lujo el pasado fin de semana de tomar parte en esta cita de tierra aprovechando el parón veraniego del Autonómico de asfalto, su día a día. Y lo hizo con tan buen tino que se impuso en la prueba a los mandos de su Skoda Fabia R5, tanto dentro de su categoría de monturas como por delante de los carcross, más acostumbrados a estas lides terrenales.

“Sentinme moi a gusto e paseino moi ben. Na terra disfrutas moito, más que no asfalto”, afirma el veterano piloto, agradecido de poder salirse un poco del corsé más técnico de su superficie de competición habitual. “Na terra podes deslizar e derrapar moito máis”, refrenda. Y admite que, al terminar el primer tramo, pensaba que se iba a ver muy por detrás de los rivales porque “o xeito de conducir aquí é moi diferente e tes que frear moi tarde e ter moito coidado coa tracción”. Pero cuando vio que había hecho el tercer mejor tiempo a sólo 2 segundos y medio del primero, “quenteime. E soubemos manter o rendemento”. En el segundo parcial ya fue el más rápido y, aunque en los tres siguiente no volvió a marcar ningún ‘scratch’ más, sí fue el más regular para acabar ganando con ocho segundos y medio sobre Javier Ramilo y casi trece sobre Sergio Fernández, a los mandos de sendos carcross.

Meira se animó a poner las ruedas en la tierra por su amistad con Tino Iglesias, cabeza visible de la escudería Desguaces Tino Racing, tras coincidir, como tantas otras veces a lo largo de los últimos lustros, en el Rally Sur do Condado. Y ayudó el hecho de que el piloto gondomareño, previsor él, había adquirido un quit de tierra para su Skoda. “Facía 15 anos que non corría en terra e como agora temos un parón en asfalto, puxémonos en serio a preparar o coche. Fixemos un test previo e listo”, desvela. A nivel técnico, echaron mano de las puestas a punto que el Skoda tiene establecidas para cada tipo de superficie. Después, todo dependía de las manos de Meira y del saber hacer de su copiloto habitual, Avelino Martínez.

“Paseino moi ben; no asfalto é todo máis técnico e na terra podes deslizar e derrapar moito máis”

La experiencia fue positiva. “Paseino moi ben”, insiste Meira. “É un ritmo diferente que no asfalto, moito máis tranquilo. Despois de cada tramo, tes tempo de revisar o coche con calma. E de, se cadra, comer algo das churrascadas que se preparan”, bromea.

Ese ambiente enganchó al gondomareño. Se debe, por razones deportivas y económicas, al asfalto. Pero anuncia que la de Ribadumia no será su última cita del año sobre tierra: “Iremos a Barbadás. Por outro amigo, Marabú (Juan Carlos Villanueva)”. Disfrute.