Iván Alonso y Manu Garrido, a ser vikingos en Dinamarca

Podrían ser drakkares por las latitudes nórdicas en las que navegarán. Pero no. Serán kayaks y canoas los que surquen las aguas de Silkeborg, la localidad danesa que desde mañana acoge los Europeos de piragüismo en su modalidad de maratón. Allí estarán los tudenses Iván Alonso y Manu Garrido para pelear por estar entre los mejores en la tierra de los vikingos.

Precisamente un descendiente de aquellos guerreros nórdicos, Mads Pedersen, parte como favorito en el K1. Porque palea en casa y porque es el campeón del mundo. Sin embargo, un curtido guerrero tudense embarcado en el Piragüismo Olívico aspira a estar lo más cerca posible de él. Iván Alonso ya sabe lo que es colgarse en oro en estas lides y después de tantos años y tantas competiciones, aún conserva el hambre de conseguir más. Mañana en la corta y el sábado en la larga peleará por conseguirlo.

El sábado también saltan al agua las canoas. Y otro tudense luchará por las medallas. Manu Garrido se fajará en el lejano norte contra los mejores del continente. Entre ellos, el grovense Tono Campos, siempre en las quinielas de favoritos. Y con porteos en lugar de saqueos, tendrá lugar la batalla vikinga del siglo XXI.

“Disfruto mucho porque voy sin presión”

Son casi innumerables las batallas que ha librado Iván Alonso dentro de un kayak. Y mañana y el sábado le esperan dos más. De nivel continental. Y sabe de sobra lo que es. Porque ha sido campeón de Europa y del mundo. Probablemente por eso, ya entrado en la madurez como deportista, afronta de una manera diferente las competiciones. “Me lo tomo al 100% y disfruto mucho de lo que hago”, apostilla antes de nada. “Pero estoy en un punto en el que voy sin presión. Y por eso difruto mucho. Yo voy a sumar. Ya no tengo el objetivo de conseguir el máximo porque, por suerte, ya lo he logrado”, destaca el palista tudense del Piragüismo Olívico.

No obstante y pese a todo, Alonso es ambicioso. Siempre lo es. Él se ve entre los cinco mejores. Pero en su fuero interno, sabe que quiere otra medalla más para su extensa colección. “Las sensaciones son los suficientemente buenas como para disputar los cinco primeros puestos", insiste. Pero el subconsciente le traiciona cuando recuerda su medalla de bronce en los Juegos Mundiales de hace unas semanas en Estados Unidos. “En la prueba larga conseguí tener mejores sensaciones y afianzar un puesto que creo que podría repetir o estar cerca de hacerlo en el Europeo”, confiesa.

El kayakista de Tui insiste en que está “con muchas ganas” y en que “las sensaciones son muy buenas”. Pero también reconoce que Mads Pedersen parte como gran favorito. “Es el actual campeón del mundo y el anfitrión”, explica.

“A Pedersen le llevo once años, que es una gran diferencia. Soy consciente de que no tengo las mismas condiciones de entrenamientos que los jóvenes y que es probable que mi situación labora y familiar no la tengan la mayor parte de los rivales”, apunta. Sin embargo, le da la vuelta a lo que parece una desventaja. “Todo esto me lleva a disfrutar de cada entrenamiento y de cada regata. Por eso estoy donde estoy”, concluye Alonso, que como los viejos rockeros, siempre está listo para dar batalla.